Carrió respaldó el pedido de levantamiento de sesión, a pesar de que en un comienzo lo rechazaba, debido al “clima de violencia que el interbloque de Cambiemos no generó”.
Un rato después, aseguró que habrá una compensación por la pérdida de poder adquisitivo. Lilita anticipó que el Gobierno instrumentará un bono en marzo próximo para compensar la pérdida que generará la aplicación de la reforma previsional, si llega a ser aprobada por el Congreso.
“Lo hemos planteado (desde el oficialismo parlamentario). Se va a aplicar. Ya lo hemos negociado. Si no, no me hubiera sentado en la banca”, enfatizó Carrió a LA NACION cuando se levantó la sesión en la Cámara de Diputados.