La Ciudad de Buenos Aires no tendrá que pagar por los nuevos refuerzos policiales que comenzarán a patrullar las calles porteñas desde la semana que viene.
El dato fue confirmado a NOTICIAS URBANAS por el presidente de la Comisión de Seguridad de la Legislatura, Lucio Ponsa Gandulfo (PJ). El diputado aseguró que "la convocatoria no fue realizada ni será financiada por el Gobierno porteño" y que ésta "será costeada con partidas propias de la Nación".
Este jueves, el secretario de Seguridad Interior de la Nación, Juan José Álvarez, confirmó que 200 policías se sumarán por semana a las fuerzas que actúan en el distrito porteño. Son efectivos retirados que serán reincorporados en sus funciones. A la vigilancia de la Ciudad ya se agregaron también 1000 integrantes de la Gendarmería Nacional y cerca 410 efectivos de la Prefectura. Ponsa Gandulfo afirmó que el costo de estos últimos también será solventado por el gobierno federal.
Los gendarmes y los efectivos de Prefectura están siendo destinados a objetivos fijos, como puestos de guardia en embajadas o dependencias del Estado para, de esta manera, liberar de esa tarea a los policías que la realizan, con el objetivo de sumarlos al patrullaje de las calles. Otro destino para gendarmería son los accesos a la Capital, para realizar revisiones de automóviles. "Su presencia es un factor que opera psicológicamente, desalentando a los delincuentes que vienen a la Ciudad desde la provincia", explicó Ponsa Gandulfo. "Igualmente -aclaró- la coordinación de los operativos está a cargo de la Policía Federal, que tiene experiencia en el trabajo sobre el ejido urbano".
Actualmente, la Ciudad paga un costo por los adicionales policiales, que son los efectivos que el distrito solicita para determinadas ocasiones. El caso de los nuevos refuerzos es diferente porque la iniciativa surgió del Gobierno nacional.
UNA COMISARÍA POR SEMANA
En declaraciones efectuadas en el programa "Claro y Sencillo" de Radio América, el subsecretario Álvarez manifestó que los gendarmes y efectivos de Prefectura que se sumaron al trabajo en la Capital equivalen a siete comisarías, ya que cada una de ellas tiene, aproximadamente, 200 hombres. Como ésta es también la cifra de policías que se planea incorporar cada siete días, el funcionario argumentó que será como añadir "una comisaría por semana".
Álvarez aseguró que, para garantizar la seguridad, uno de los delitos centrales a combatir es la portación ilegal de armas. "El 99,5 % de los delitos violentos -puntualizó el subsecretario- se cometen con armas ilegales. Ahí nosotros queremos centrar el aspecto punitivo que debe tener el Estado y gran parte de las operaciones que están haciendo las fuerzas de seguridad". El funcionario aseguró que, en ese sentido, su área está trabajando "muy fuerte" con los diputados y senadores de todos los bloques.
También confirmó que se están realizando mayores controles en los accesos de la Capital durante las 24 horas y destacó la labor policial en las investigaciones realizadas por la policía en los últimos casos de secuestros express.
Además, Álvarez dejó entrever cuál será la actitud que tomarán las fuerzas de seguridad de registrarse nuevos cortes de ruta y accesos a la Ciudad como medida de protesta. "Yo personalmente he tenido contacto con varios dirigentes y les he hecho saber que nosotros no vamos a permitir que continúen actitudes como bloquear la Capital Federal", amenazó. Este tema figura en la agenda de las próximas reuniones que mantendrá el funcionario con los jefes de las fuerzas federales.