El chef de la Casa Rosada, Dante Liporace, fue distinguido por la Legislatura por su aporte a la cultura y la gastronomía porteña como “Personalidad Destacada de la Ciudad de Buenos Aires”, una declaración aprobada a instancias de un proyecto de la diputada Carolina Estebarena, del oficialismo de Vamos Juntos.
“Me siento agradecido por esta distinción; tuve una vida de mucho trabajo y pasión por la gastronomía. Vine de Bahía Blanca y con mucho esfuerzo y tesón estudié y llegué a trabajar en el maravilloso bristró español “El Bulli” junto a Ferran Adriá”, sostuvo el homenajeado.
Durante la ceremonia en el Salón Montevideo, a donde se acercaron a saludarlo algunos de sus colegas como Pietro Sorba y Leandro Caffarena, quienes con su presencia le regalaron “una caricia al alma”, según dijo, el reconocido cocinero agradeció la iniciativa de Estebarena por “considerar a la cocina como un arte y como un elemento importante en la Ciudad de Buenos Aires”.
“Cada día y con amor, cada cocinero pone de sí lo mejor para lograr los platos más sabrosos. Yo quise llevar lo más maravilloso de la cocina ítalo-francesa y combinarlos con ingredientes de nuestro país y así salieron experiencias que se ven reflejadas en los platos que brindo a más de 700 personas diriamente en Casa Rosada y a nuestro presidente Mauricio Macri”, dijo.
La legisladora, por su parte, explicó que el reconocimiento está en “sintonía” con la “importancia” que el distrito le otorga a la gastronomía “no sólo como impulsor del turismo sino también como motor cultural” y destacó sobre Liporace, no sólo sus cualidades como chef y su aporte a la cultura, sino “el esfuerzo, la disciplina y el estudio”.
“Sus logros no fueron productos del azar, persiguió un sueño y trabajó duro para llegar a ser lo que es hoy. Estoy muy contenta de haber podido impulsar este reconocimiento y que mis colegas legisladores me acompañaran en la aprobación”, concluyó.
Liporace estudió cocina en el Colegio del Gato Dumas, continuó su perfeccionamiento en Europa y se convirtió en uno de los más exitosos y destacados chefs argentinos a nivel nacional e internacional.
De regreso al país abrió el restaurante “Moreno” en el barrio de San Telmo, luego “Tarquino”, con el que se hizo conocido y valorado, aunque decidió cerrarlo en 2016 para dedicarse exclusivamente a la cocina de la Casa Rosada, desde donde se elabora tanto el menú para los empleados como para el Presidente de la Nación y las personalidades que lo visitan, como mandatarios extranjeros y otras personalidades del ámbito político, social y cultural.
