A un año de las elecciones ejecutivas, el sector de Cambiemos encabezado por Facundo Prades comienza a mostrar sus diferencias y generar fricción con la dirección general del espacio. Esta vez fue el diputado Gerardo Terraz el que declaró, entrevistado por una radio de Río Gallegos, que el gobierno no tiene intenciones de resolver el conflicto con los gremios.
Fundamentalmente, el diputado acusó al Gobierno Nacional de mala fé, afirmando que dilatan adrede la resolución del conflicto mientras intentan reducir el personal de la empresa. Más aún, insinuó que la salida para la resolución del conflicto es a través de la reincorporación de los empleados despedidos hace meses, chocando frontalmente con la resolución de Nación.
La de Terraz es la misma línea argumental que la del Kirchnerismo. Mismo esta semana, el Ministro de Gobierno Fernando Basanta criticó, con el mismo tenor, a Nación, a la que acusó de querer abandonar la mina. “Lo cierto es que no quieren terminarla y ponen excusas”, declaró el Ministro respecto a la obra de la termousina. En relación a las acusaciones de la oposición, viene al caso que, coincidentemente, hoy se condenó a Roberto Baratta, mano derecha de Julio de Vido, por la malversación de fondos destinados, en su momento, a YCRT.
