Será una semana clave, tanto para el Gobierno de Mauricio Macri como para la oposición. La Cámara de Senadores define este miércoles , para moderar el aumento tarifario y retrotraerlo a los valores de noviembre de 2017- y que ya fue aprobado por Diputados-, se convierte en ley o respalda la propuesta del oficialismo, y algunos senadores peronistas, de bajar a la mitad el IVA para usuarios residenciales de los servicios de electricidad, gas y agua.
El dictamen de mayoría, firmado por el Justicialismo y el Frente para la Victoria tras el último plenario de las comisiones de Derechos y Garantías, Presupuesto y Hacienda y Minería, Energía y Combustibles, pretende darle el último empujón al expediente que propone retrotraer los valores de las tarifas de servicios públicos al primero de noviembre de 2017 y establece que las subas no pueden ser mayores a los aumentos de salarios.
En cambio, el proyecto del oficialismo busca rebajar, por doce meses prorrogables, a la mitad la alícuota del IVA para usuarios residenciales que actualmente alcanza el 21 por ciento.
Asimismo, rebaja del 27 al 21 por ciento el monto del mismo impuesto para micro, pequeñas y medianas empresas.
La propuesta de bajar el IVA a las tarifas de servicios públicos tendría, además, un costo menor a los 20 mil millones de pesos, según indicó el presidente Provisional del Senado, Federico Pinedo.
“Si quieren que bajen las tarifas deben votar el proyecto del oficialismo. Porque el otro será vetado por el presidente” Mauricio Macri, argumentó Pinedo al finalizar el plenario de comisiones de la semana pasada.
El dictamen propuesto por el oficialismo, a último momento el martes pasado, retoma una iniciativa impulsada en abril por el jefe del bloque de senadores peronistas, Miguel Angel Pichetto; y que los gobernadores del mismo signo político como Juan Manuel Urtubey, de Salta, y Juan Schiaretti, de Córdoba, consideraron viable tanto para las provincias como para la Nación.