Pasó apenas una semana de una extraña campaña para Rafael Bielsa y Mauricio Macri: se dijeron de todo “como si” fueran candidatos en Capital, aunque todavía ninguno de ellos confirmó su postulación. Con todo, en la intimidad, el Canciller se hizo reproches sobre la estrategia que eligió para cruzar al ingeniero, y admitió muy entre amigos que Macri le ganó por puntos en lo que podrían ser las preliminares de la campaña 2005.
“Por estar mirando el pasado, a Bielsa se le escapó la tortuga”, disparó Macri esa semana en respuesta a una primera piña del Canciller (desde Guatemala, lo había asociado al menemismo) y en alusión a la inclusión de las Islas Malvinas como territorio británico en la Constitución Europea: “Es un nuevo papelón que se suma al caso Molina”.
La alusión enfureció al canciller, y esto lo llevo a elegir un camino de confrontación que no convenció ni al propio Bielsa: sacó a relucir las comisiones de las transferencias de los jugadores de Boca para pelear en la campaña porteña. “Un bochorno”, coincidieron, palabras más o menos, dos fuentes porteñas que entran y salen de la Casa Rosada, sin mayores preámbulos.
"El papelón es pedirle a los jugadores de fútbol Bermúdez y Barijho que le den dinero de las transferencias, como lo acaban de declarar Bermúdez y Barijho", lanzó. Ocurre que el peronista y boquense Roberto Digón le provee información al canciller, quien anticipó que tenía varios “biblioratos” para presentar, en el caso de competir con Macri en la campaña porteña.
Por su parte, Bielsa admitió esta semana que Néstor Kirchner aún no le habló de su candidatura porteña y que espera una “señal” presidencial. Por las dudas, en Washington convocó para una eventual despedida a un grupo de embajadores argentinos, reunidos en la capital norteamericana, para planificar las estrategias "posdefault" que aplicará la Cancillería durante los próximos dos años, con él al frente o no, según dijo en esa reunión.
Un dato: Alberto Fernández aseguró esta semana que todavía no está decidido quién encabezará la lista de diputados del Frente para la Victoria orteño: “Honestamente, no lo sé”, apuntó el jefe de Gabinete, cuando le preguntaron si la cabeza de lista del oficialismo en la Ciudad sería el ministro de Educación, Daniel Filmus o el canciller Bielsa.
La discusión allí pasa por si la apuesta final para octubre es al más confiable o al que mejor mide entre los porteños, siempre proyectando un triunfo al 2007. Seguramente se priorizará ganar y allí Bielsa está por encima de su colega de gabinete en todas las encuestas. Igualmente en la Rosada todos repiten a coro que "los votos los pone Kirchner" algo que deja un margen de duda.
En este marco, cuando se le mencionó si todavía era posible que la senadora Cristina Fernández de Kirchner podía jugar en el tablero porteño, Fernández admitió que estuvo “mucho tiempo” tratando de convencerla pero que nunca lo había logrado: “No creo que esta vez sea la ocasión". La Provincia ya se preapra para su desembarco.