Igual que un defensor aguerrido de los años sesenta, el político salió al cruce de su oponente para recuperar la iniciativa. La metáfora le calza perfectamente al legislador Ariel Schifrin, quien votó en contra de la incorporación a la Planta Permanente de la Legislatura de 260 personas. "Esta gente había entrado con los legisladores anteriores que habían terminado su mandato el año pasado. Es gente que participó previamente a que yo fuera legislador. Por eso creo que el contrato moral que tenemos con los vecinos y el Estado, que significa que entramos y salimos, y cuando nos vamos, nos retiramos con nuestros asesores", detalló el ex funcionario porteño.
Schifrin explicó que "los diputados puedan hacer ingresar a la Legislatura a ocho, a doce asesores, según su especialidad o función", pero destacó que "ese tema no sería importante si al terminar el mandato esa gente se va".
El diputado cree que esta actitud se debió a una maniobra política que comenzó hace un año. "En realidad el año pasado, antes de que vencieran los mandatos de la legislatura anterior se armó una maniobra de parte de ex legisladores para pasar a sus empleados políticos, de sus despachos a áreas institucionales o administrativas. Entonces, mucha de esta gente pasó a estos lugares. Por supuesto no tenían ninguna función, ninguna utilidad. Y ahora está la excusa de que esta gente está en la legislatura y es necesaria. Con 1.200 personas que hay en la planta permanente, en este momento, la legislatura podría funcionar perfectamente, lo de agregar 300 más, fue una maniobra política", acusó el ex integrante de la juventud comunista.
El político no sólo criticó lo votado en la sesión de este jueves, sino que además, le pegó duro al ex jefe de Gobierno porteño, Fernando de la Rúa. "La Legislatura tenía 900 empleados. Se había llegado a ese número porque 200 habían entrado por concurso, pero luego la Justicia, gracias a un ardid armado por el ex procurador de la Ciudad de De la Rúa, incorporó a un montón de empleados más que venían del viejo Concejo Deliberante. Entonces, de los 200 pasamos a 900 y en realidad hacían falta 500. Pero ahora estamos llegando a los 1.200", aseguró Schifrin al desmenuzar el conterulio legislativo.
Sin embargo, las quejas del ex hombre fuerte del primer gobierno ibarrista no terminaron ahí. "Para colmo, la Legislatura votó los nuevos ingresos a la planta permanente de forma disimulada, como si fuera un concurso. El concurso en 280 (sic) cargos para 280 aspirantes. Es un concurso evidentemente trucho, porque es increíble que se haya llevado adelante este bochorno. Es inconstitucional, porque debería haberse hecho público y abierto. Esta gente viene pasando de legislador en legislador", se ofuscó Schifrin, en declaraciones radiales al referirse al tema de los ingresos.
Luego y como quien no quiere la cosa, el legislador aprovechó para pegarle a Ibarra por la última votación legislativa. "Esto fue votado por el ibarrismo y el macrismo, por eso creo que Ibarra cambió. Yo lo conozco hace muchísimos años, y me consta que peleó por los concursos, peleó contra aquel procurador que eludió contestarle correctamente a la justicia para que entrara esa lista de 700 radicales que impuso la justicia en su momento. Y no lo quiero discriminar políticamente, la realidad era así, una corporación política que manejaba el problema del empleo público. Creo que cambió mucho. Tenía la opción de armar una fuerza política y mantener sus valores, pera la jefa de su bloque, Laura Moresi, una mujer de su estricta confianza, también colocó una gran cantidad de empleados", disparó su ex amigo político.