La agencia de noticias Télam atraviesa una de las crisis más fuertes en su entorno y en las últimas horas comenzaron a circular rumores relacionados a una ola de despidos que ordenará el titular del sistema de medios públicos, Hernán Lombardi.
Asimismo, con la desvinculación de dos periodistas se paralizó el servicio informativo durante ocho días de las últimas tres semanas. En tanto, el operativo que encabezará Lombardi en esta ocasión implicará el despido de entre 300 y 400 trabajadores de la agencia. No obstante, la versión más consistente habla de 380 empleados, entre periodistas y administrativos.
La primera jugada que se realizó en este medio público fue la designación de Pablo Ciarliero como nuevo integrante del directorio, como condición para ratificar a Rodolfo Pousá y Ricardo Carpena como presidente y vice, respecticamente. La llegada del exfuncionario de Radio Nacional, declarado persona no grata por los periodistas y trabajadores de la emisora, se transformó de hecho en una intervención política y causó malestar en las segundas líneas de la agencia de bandera.
La crisis se dio en el marco de que tanto Pousá como Carpena no quieren ser la cara visible de esta grave medida. Los dos experiodistas le pidieron a Lombardi que, para dar la orden de ejecutar los despidos masivos, primero tenían que girar los recursos para el pago de indemnizaciones, algo que cayó muy mal en el Centro Cultural Kirchner, sede operativa del ex funcionario de la Alianza.
En la actualidad, trabajan en Télam al menos 900 personas, de las cuales más de 600 están sindicalizadas en alguna de las tres organizaciones gremiales que conviven dentro del organismo, lo que asegura un conflicto.
La discusión durante este fin de semana en el CCK fue dónde pondrían a funcionar a los rompe huelgas: si en el propio edificio donde tiene su oficina el titular del Sistema de Medios y Contenidos Públicos o si lo trasladaría a Tecnópolis.
Esta última alternativa sonaba como la más firme, dado que es un lugar alejado del centro porteño, donde funciona Télam, y es el lugar donde Lombardi había planificado al inicio de su gestión trasladar todos los medios públicos.
Ante estas versiones, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) y el Sindicato de Trabajadores de Prensa (Sitrapren) evaluaban por estas horas convocar a una asamblea general para este lunes, para analizar un plan de lucha ante el inminente ajuste.