"Quien sabe a cuanto estará el dólar la semana que viene", es la pregunta que ronda en todos los pasillos de la ciudad. Aunque a primera vista, se puede interpretar como un número tan ajeno a la situación argentina como el índice del riesgo país, la realidad cotidiana que viven día a día el personal sanitario municipal, indica que el precio del material descartable para cirugías registró un aumento tan desconsiderado que lo hace inaccesible para el gobierno porteño. Esta problemática se agrava aún más a raíz del feriado cambiario que no permite establecer un valor real para el dólar.
La Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dividió las posibles situaciones que se pueden suceder en los hospitales porteños en cuatro niveles; por el momento la salud estaría en el segundo nivel que significa el desabastecimiento de algunos insumos.
Ante esta situación, el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra decidió decretar una serie de medidas para aliviar esta problemática. Entre ellas la implementación de un clearing ínterhospitalario que esta siendo utilizado para intercambiar insumos entre los diferentes hospitales públicos porteños y la centralización en las compras.
Muchos médicos municipales creen que la situación es mucho más grave de lo que se manifiesta habitualmente en los medios capitalinos. "El secretario de Salud expresó que hay insumos para un mes, pero el funcionario se refirió a situaciones normales. ¿Que pasa si mañana hay alguna situación especial como la represión del 20 de diciembre, hay guantes suficientes para atender a los pacientes?", se preguntó el medico sanitarista Jorge Landriscina.
La respuesta del subsecretario de Servicios de Salud, Alfredo Vidal es clara: "tenemos que salir a compra elementos, estoy casi seguro de que los conseguiremos, pero de no ser así, podemos pasar al nivel 3 en una semana". La cartera de Salud a cargo de Jorge Stern, implementó hace más de dos meses, "algo así como un comité de crisis". El mismo pide informes a los hospitales sobre la situación del stock los días miércoles, el jueves por la mañana recibe la respuesta y el viernes deciden el funcionamiento de la semana siguiente.
"En realidad lo que hizo Ibarra – dijo Landriscina – fue expresar que va decretar la Emergencia Sanitaria cuando estemos en el nivel 4, lo que parece ser es un grave error. Porqué no hacerlo ahora y empezar a hacer una gestión en serio. Porque no se toman las medidas necesarias para que la salud de los porteños nunca corra peligro a causa del desabastecimiento". También agrego que "habrá que tomar la decisión política de empezar a comprar y producir medicamentos genéricos, esto se puede hacer en laboratorios, o en las farmacias de los hospitales".
Vidal, admitió que últimamente están recibiendo no sólo la afluencia de los bonaerenses, sino también de los pacientes que hasta hace un par de meses se atendían a través de sus obras sociales. En ese sentido, el funcionario expresó que la decisión de Ibarra es "atender a todos hasta que podamos".
"El único sistema de salud que está funcionando es el de la Ciudad de Buenos Aires, así que imagínese que puede llegar a pasar si los pacientes del conurbano bonaerenses vienen masivamente a atenderse a la Capital Federal", alertó Landriscina.