En sólo un par de horas, el número de acceso rápido 134 que habilitó el el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, recibió 556 llamadas con datos sobre casos de corrupción; de las cuales sólo 70 tenían información sustancial.
Dicha cartera ofrece una recompensa de hasta $2 millones para recuperar plata y otros bienes producto de las irregularidades mencionadas en los denominados “cuadernos de las coimas” cuyo autor es Oscar Centeno, exchofer de Roberto Baratta, quien supo ser mano derecha del exministro Julio De Vido. Las setenta comunicaciones que se consideraron con información importante fueron derivadas a la Justicia con posibilidad de convertirse en una denuncia. “El objetivo es que toda aquella persona que pueda dar información fehaciente de dinero, propiedades, testaferros, personas que saben que son cosas del pueblo que están en manos de corruptos puedan volver a la gente, porque eso se va a convertir en hospitales o equipamientos para las fuerzas de seguridad”, manifestó Bullrich.
“Si se comprueba o esa propiedad tiene un testaferro, que fue comprada por uno de los tantos corruptos que tiene el país, al momento de la comprobación se hace un acuerdo con el fiscal y ese bien es tomado por la causa, por el Estado en la Justicia y se le paga a la persona el 5% del valor o hasta 2 millones de pesos”, agregó. En ese marco la funcionaria destacó que todo el procedimiento es “secreto” y la identidad de la persona que aporta datos es “preservada”. Estimaciones de la fiscalía a cargo de Carlos Stornelli, sostienen que empresarios energéticos y de la construcción vinculados a la obra pública pagaron al menos U$S 60 millones en sobornos para financiar las campañas electorales de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.