El líder de Evolución, Martín Lousteau, se muestra como un dirigente en campaña. Da charlas a estudiantes, participa de actos en homenaje a Raúl Alfonsín y recorre el país. En ese marco, Y frente a un auditorio colmado por más de quinientos estudiantes, docentes y graduados, que se dieron cita en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Salta, Lousteau abordó temas relacionados a la actualidad política y económica del país.
El diputado nacional recordó al expresidente Raúl Alfonsín y dijo: “Raúl Alfonsín fue el último prócer de la Argentina, y su gesta la última instancia que vivimos como unidad”.
Luego, se metió a analizar los temas nacionales. “Argentina está en una crisis otra vez, es un recurrencia de nuestra dirigencia. La sociedad aprendió que no quería más crisis y sin embargo, estamos ahí de nuevo”, manifestó.
En otro tramo de la charla resaltó; “Ninguno de los problemas que me consultan como economista son nuevos. Esta crisis no es igual a las otras porque el humor social es diferente y obliga a tomarlo con mayor seriedad. Es una crisis política porque luego de tapar la economía y jugar peligrosamente con la grieta, se notó que nada cambió y se reflejó en el mercado. La Argentina tiene problemas repetidos, a uno le gustaría tener problemas nuevos que impliquen nuevos desafíos, no estar hablando siempre de los mismos. Uno de cada cinco pesos que el Gobierno gasta, no los tiene, y de algún lugar tienen que salir”.
En la charla, Lousteau pidió ser “propositivos, esto se hace a partir de un diagnóstico profundo que nos permita determinar dónde queremos ir”. Y reclamó adoptar la “incomodidad para crecer, debatir y construir, y marcar la propia identidad” porque “las diferencias se dirimen a partir del intercambio y de los acuerdos”.
Y continuó: “Falta vocación para administrar lo público; cada peso que es inyectado en el Estado, tiene que estar bien gastado. Esto es algo que en la política no se discute. Deuda, inflación, déficit, desigualdad, pobreza, están generados por una falta de vocación de manejar los recursos públicos”.
Para finalizar, señaló: “Inflación y deuda son 2 caras de una misma moneda. Provienen de gastar más de lo que uno recauda. Tenemos que aumentar la productividad, algo que en la Argentina no ocurre hace 40 años. Si no nos tomamos las cosas con depresión o facilismo mágico, el futuro que nos espera será mejor. Tenemos que reimaginarnos el Estado y la política”.