La suspensión del River y Boca por el ataque al micro de Boca provocó una guerra entre las máximas autoridades de ambos clubes. Los jugadores de Boca están decididos a no jugar el partido y el presidente del club, Daniel Angelici, llevará el reclamo hasta las máximas autoridades. Esta decisión provocó el enojo de las autoridades del club de Núñez.
“Ayer hubo un acuerdo para que Boca no jugara en desventaja. River generosamente dijo que no quería ventajas”, recordó el presidente del club Millonario en un breve diálogo con la prensa
El presidente de River, Rodolfo D’Onofrio, se mostró este domingo “totalmente de acuerdo” con la postergación de la revancha de la final de la historia de la Copa Libertadores. El mandamás “millonario” apuntó contra su par de Boca, Daniel Angelici, por haber modificar su postura del sábado y “faltar a su palabra”.
“Yo no tengo ninguna comunicación ni me ha llegado nada a River para hablar sobre la solicitud de puntos que hizo Boca. No me cabe la menor duda que se va a jugar el partido”, explicó en rueda de prensa en el estadio “Monumental”.
D’onofrio manifestó su “sorpresa” por la postura de Boca, porque River “generosamente” se prestó a la postergación pese a que el presidente de FIFA, Gianni Infantino, le dijo a Angelici que el partido tenía que jugarse a las 19:15.
“Ayer hubo un acuerdo para que Boca no jugara en desventaja y River le dijo que esta ventaja no la queremos. El presidente de la FIFA le dijo delante mío a Angelici que el partido se jugaba a las 19:15. Yo le dije al oído que tenía mi solidaridad a Angelici, que volvió a la reunión y contó la situación de los jugadores, y River no quería tener ninguna ventaja”, recordó.
“Es una pena enorme que por quince inadaptados tengamos que vivir todo esto. Quince personas y algún error en seguridad llevó a todo esto. Todo River tiene la sensación de dolor; era una fiesta”, concluyó el empresario que conduce los destinos del club de Núñez desde fines de 2013.