Un nuevo escándalo se suma a la ola de denuncias por acoso y abuso sexual. Esta vez en el Senado, el legislador bonaerense de Unidad Ciudadana Jorge Romero fue denunciado públicamente por abuso sexual y ya presentó su renuncia y un descargo en su Facebook.
El presidente del PJ bonaerense Fernando Gray presionó hoy al senador provincia de La Cámpora que es acusado por abusar de una joven militante con que “debería renunciar” al cargo, y adelantó que en caso de que ello no ocurra pedirá que el partido analice su conducta. Finalmente el Senador renunció.
Esta denuncia es la segunda en el Senado en las últimas horas, luego de que la empleada del Congreso Claudia Guebel presentara una acusación formal en la Justicia por abuso sexual y acoso contra el legislador radical Juan Carlos Marino.
Romero, ex concejal de Florencio Varela e integrante de la agrupación La Cámpora, publicó un texto en su perfil de Facebook en el que explica su decisión.
“Soy un varón criado en una sociedad patriarcal. Además soy un militante político con responsabilidades. Desde ese lugar, y a la luz del trabajo de visibilizacion que han hecho mis compañeras de la organización donde milito, puedo ver que en el pasado tuve prácticas machistas que en ese momento parecían naturales. Es por eso que he decidido dar un paso al costado de mis responsabilidades políticas para someterme a los procesos que determine la aplicación del protocolo que la organizacion ha generado para éstos casos. Deconstruirnos significa mejorarnos a nosotros mismos en todos los sentidos y eso es lo que debemos hacer si queremos mejorar también la organización donde militamos y, en definitiva, construir una sociedad más justa, libre y soberana”, escribió en su cuenta.
El senador dejó su banca luego de que la denunciante Stephanie Solange Calo, una ex compañera suya de La Cámpora, narró cómo Romero la encerró en un baño durante una fiesta, le mostró su pene y quiso obligarla a que le practique sexo oral.
“La Cámpora encubrió, encubre y va a seguir encubriendo a estos abusadores hasta que nosotres dejemos de callarnos”, disparó en su escrito. “El LOCO ROMERO me agarra y me encierra en el baño con él impidiéndome salir. Se baja los pantalones, saca su miembro afuera y me empieza a pedir que le practique sexo oral. Lo cual me negué reiteradas veces y le suplicaba que me dejara salir. Le llegué a prometer que otro día lo hacíamos para que me abriera la puerta, golpeé las paredes y la puerta para que alguien me abriera. Nadie me ayudó. Este no me forzó a que le practicara sexo oral, pero sí me insistió y no me dejaba salir del baño. Yo estaba desesperada”, denunció la mujer.