El próximo viernes 29 de marzo es el cierre de listas en la provincia de Tucumán. De acuerdo con algunos sondeos y a los acuerdos políticos, el actual gobernador reelegiría cómodamente.
Si bien es cierto que Manzur y Alperovich no lograron ponerse de acuerdo y dividieron al peronismo, todo indica que el mayor beneficiado de la grieta intra-peronismo es el actual gobernador.
Por un lado, Manzur logró cerrar con la mayoría de los intendentes, cerrando así una territorialidad casi perfecta: tendrá el control del estado provincial y de los municipios electoralmente más relevantes.
Por el otro, las encuestas están del lado del gobernador. Su gestión es valorada positivamente por la gran mayoría de los tucumanos. Si bien en el inicio el principal problema era su parecido con Alperovich, la decisión de Cristina Fernández de Kirchner de apoyar al último, facilitó la diferenciación. Al parecer, la marca de Cristina aún pesa fuerte en Tucumán, y es más un estigma que un salvavidas. Así es que, en los últimos meses, Manzur aparece liderando también en intención de voto.
Todo indica entonces, que el próximo 9 de junio Juan Manzur volverá a sentarse en el sillón de Lucas Córdoba como gobernador de la provincia de Tucumán por segunda vez al hilo.