El descontento de la UCR con el Pro venía en ascenso y provocó fisuras dentro de la Convención Nacional del radicalismo, donde un sector quería romper su alianza con el Pro en Cambiemos para cruzarse a las filas de Roberto Lavagna.
Desde al menos el segundo año de gestión de Mauricio Macri, la UCR denunciaba que el Pro no tenía en cuenta su opinión para tomar medidas. Con sentimiento de ser una figurita decorativa, en este año electoral salieron a ponerle los puntos al Pro y exigieron que la fórmula presidencial que se presente a las elecciones de octubre esté formada por Mauricio Macri y un/a radical.
Ante esta situación que ameritaba una negociación de urgencia, el Pro y la UCR realizaron este jueves una cumbre entre las 21 y las 24, en un restaurante del barrio Recoleta, donde estuvieron presentes María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta, Marcos Peña, Rogelio Frigerio, mientras que de la pata radical participaron Alfredo Cornejo (Mendoza) y Gerardo Morales (Jujuy).
A pesar de las tensiones, el clima fue bueno. Y aunque no se haya tocado el tema de designar un vicepresidente radical como candidato, el Gobierno nacional se comprometió a darle mayor participación en la toma de decisiones económicas dentro de la estrategia de cara a los comicios. De esta manera, germinó el nuevo “comando de campaña”, donde la denominada “mesa chica” se agranda para algunos temas. Pero el Pro acostumbra a hacer este tipo de movidas en las crisis pero todo termina funcionando más o menos igual.
Durante una reunión previa fueron informados por Dujovne y Sandleris acerca de cómo está el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional cuyo directorio tiene que aprobar estos días su tercera revisión previa al desembolso de 10.700 millones este mes y esta semana que entra viajarán a Wáshington en busca de lograr nuevos fondos para pasar más tranquilos el año. En los pasillos se habla de 20.000 millones extra.
El ministro Frigerio se pronunció a favor de “seguir consolidando la salud de Cambiemos”, en referencia a las reuniones de ayer y que tendrán continuidad durante los meses prelectorales. “Me parece que es sano discutir cosas entre los miembros del mismo espacio político”, agregó el ministro, y aseguró: “Nos reunimos todos los días con el radicalismo”.
El encuentro descomprimió bastante la tensión entre los socios, pero para estas elecciones los radicales reclaman mayor participación y le negociación continuará.
Frigerio no descarta a Lousteau
El diputado nacional y exministro de Economía de Cristina Kirchner, Martín Lousteau, se afilió a la UCR porteña el 5 de diciembre pasado, con la idea de volver a pedir la conformación de Cambiemos en la Ciudad para competir en una interna con el actual jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.
Ahora, el economista no fue descartado por el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, para ocupar el cargo después de que la Unión Cívica Radical (UCR) pidiera más espacio en la toma de decisiones del gobierno, para que la coalición Cambiemos no se resuma a una cuestión netamente electoral.
“No me parece un disparate. Tenemos muchas más coincidencias que disidencias con él y puede estar mucho más involucrado de lo que ha estado en la solución de los enormes problemas que tiene Argentina. Ojalá sea así”, dijo Frigerio.
