Este miércoles 29 de mayo se cumplieron 50 años del “cordobazo”, la movilización obrera que fue apoyada por sectores estudiantiles que abarcó toda la capital provincial, culminando así en una de las más brutales represiones que ocurrió en la historia argentina. La jornada dejó como resultado manifestantes muertos.
En 1969 la Confederación General del Trabajo (CGT) estaba partida en dos: la CGT Azopardo y la CGT de los Argentinos, tal como ocurrió en otras épocas. Pero la difícil situación económica que afrontaba el país permitió que acordaran una huelga general para el 30 de Mayo. El entonces presidente de facto, Juan Carlos Onganía, se negaba a restablecer la negociación colectiva y la actualización salarial, suspendidas en el ´67
En Córdoba la manifestación ocurrió un día antes de lo previsto y se optó por llevar a cabo la modalidad propuesta por Agustín Tosco, del Sindicato de Luz y Fuerza. Dicha modalidad implicaba el abandono de los lugares de trabajo desde las 10 de la mañana hasta el día siguiente -es decir por 36 horas en lugar de 24- y la movilización hasta un acto en el local de la CGT.
El repudio a los asesinatos de la dictadura y en homenaje a las víctimas, el aumento general de salarios del 40%, el funcionamiento de las comisiones paritarias para renovar los convenios colectivos, la defensa de las fuentes de trabajo, el reestablecimiento de las libertades democráticas y sindicales, eran alguno de los principales ejes de la medida de fuerza.
Se sabía que la decisión obrera iba a dar que hablar, dado que iban a llegar columnas desde toda la Ciudad y desde distintos lugares de la provincia. Pero tuvo un refuerzo distintivo: la participación de estudiantes universitarios. Los jóvenes ya venían marchando en contra de las intervenciones del Gobierno militar en las facultades.
Ese 29 de mayo, las columnas que marchaban pacíficamente fueron detenidas en puntos estratégicos, por parte de la policía provincial y federal que comenzó a atacarlos para evitar que lleguen al centro. Esto desembocó en una generalización de la protesta. En tanto, las columnas que fueron interceptadas se desbordan por los barrios para llegar al centro. Allí recibían el apoyo de los vecinos que le acercaban objetos a los manifestantes para que monten barricadas en contra de la policía.
El desencadenante de la violencia fue el asesinato, por parte de las fuerzas de seguridad, del obrero del sindicato SMATA Máximo Mena. Por eso, los manifestantes tomaron la ciudad durante horas, hasta que el Gobierno decidió enviar al Tercer Cuerpo del Ejército para que ocupe Córdoba. Se dictó el estado de sitio y comenzó una feroz cacería.
Los enfrentamientos continuaron entre la noche del 29 y el 30 de mayo. Durante los hechos, murieron manifestantes por la represión, aunque no existe una cifra exacta de cuántos. Algunos historiadores hablan de 20. Además, fueron detenidos dirigentes gremiales, entre ellos Tosco y Elpidio Torres, este último de SMATA.
A 50 años del #Cordobazo recordamos esa gran movilización encabezada por Atilio López y Agustín Tosco que marcó la historia de las luchas populares en nuestro país.
Posted by Jorge Taiana on Tuesday, May 28, 2019