“Administremos la alegría porque el festejo sigue mañana”. Emocionado, con lágrimas en los ojos, Alberto Rodríguez Saá se proclamó ganador de las elecciones en San Luis y convocó a una renovación de la clase dirigente de su provincia. Ante el clamor de la militancia, que le dedicó cánticos a los adversarios políticos del flamante gobernador reelecto, entre los que se encuentra el propio hermano del mandatario, el senador Adolfo Rodríguez Saá, el histórico dirigente puntano aseguró haber ganado una batalla, semejante a la de La Tablada a cargo del Coronel Pringles.
“Hemos ascendido al grado de generales, después de la batalla del 16 de junio. Ustedes -en alusión a los militantes de su partido- han construido este extraordinario triunfo electoral”, reflexionó.
“Esta elección ha sido el triunfo excepcional de una nueva generación de dirigentes: la juventud que ha sido acompañada por el peronismo histórico. Los políticos históricos que peinamos canas nos dimos cuenta que San Luis necesitaba esta enorme renovación de dirigentes que se ha generado en esta elección”, afirmó Alberto Rodríguez Saá en un mensaje encriptado hacia su hermano, Aldolfo.
“Es natural que esta noche nos sintamos un poco decepcionados, tristes, cansados, porque hemos trabajado juntos por nuestra provincia, que nos necesita. Luchamos juntos tanto como pudimos, y aunque nos quedamos atrás, somos hombres y mujeres de convicciones que seguiremos luchando”, analizó el postulante del frente Juntos por la Gente, Adolfo Rodríguez Saá.