El vicepresidente tercero de la Legislatura porteña, el socialista Roy Cortina, explica los motivos que llevaron a su partido a aceptar la invitación de Horacio Rodríguez Larreta para sumarse a la coalición de Juntos por el Cambio de cara a las próximas elecciones.
“Hicimos un acuerdo de partidos. Me sumé a un espacio que viene de gobernar la ciudad, que se quiso ampliar y que está integrado por el Pro, la UCR, Confianza Pública y la CC. Excepto del Pro, fuimos aliados en algún momento de todos esos partidos”, remarca Cortina en diálogo con Noticias Urbanas.
El legislador, que buscará renovar su banca en los comicios porteños, aclara que se incorpora al oficialismo con su “autonomía e identidad”. Y asegura que las opciones del kirchnerismo y de Consenso Federal no están preparadas para gobernar la ciudad.
“No me imagino la ciudad gobernada por Matías Lammens y La Cámpora”, dice.
-¿Por qué decidieron sumarse a Juntos por el Cambio?
-Decidimos sumarnos a un espacio multipartidario en la ciudad. Nos sumamos con nuestra identidad y visión de la realidad. Fuimos invitados por el jefe y vice de gobierno, aun sabiendo las disidencias que tenemos en algunos puntos de la gestión.
Lo hicimos básicamente por dos motivos. Primero, una suerte de vacancia de la centroizquierda y un fracaso de una construcción de un tercer espacio antigrieta consistente. Dialogamos mucho con el espacio de Lavagna, pero entendimos que ahí no hay camino.
Y otra cosa tiene que ver con la responsabilidad. Más allá de nuestras pertenencias ideológicas, lo concreto y objetivo en el ámbito de la ciudad es que hay tres opciones: la opción del actual gobierno y dos que se postulan como alternativa. Si tengo que dirigirme a los porteños responsablemente ninguna de las dos opciones opositoras es consistente. No me imagino la ciudad gobernada por el presidente de San Lorenzo, La Cámpora y una congregación de fuerzas de centroizquierda. Esa experiencia ya la viví y la padecieron los porteños a principios de este siglo con la crisis del 2000 y el gobierno de Ibarra. Eso terminó con 193 muertos y dos funcionarios presos por corrupción. Y lo de Lavagna también es inconsistente.
El acuerdo que hicimos es estrictamente de la ciudad.
-¿Le sorprendieron las dificultades que tuvo Lavagna?
-El tema es que en la ciudad la experiencia fue espantosa, todavía se están peleando en la Justicia por ver qué lista se presenta. No le puedo decir a los porteños que esa puede ser una opción donde participe el socialismo.
Decidimos aportar nuestra mirada en un espacio más amplio y tratar de mejorar la coalición que está gobernando ahora la ciudad. No es una cosa extraña para nosotros, porque no hemos sido una oposición destructiva o dura, que vota todo que no. Hemos votado en contra de muchos temas estratégicos para el gobierno de Larreta con mucha rigurosidad, pero cuando vimos que había cosas bien hechas no nos importó que las hiciera el oficialismo y las acompañamos.
No es una cosa traumática para nosotros. Nos sumamos a un frente con nuestra identidad.
-Larreta apostó a ampliar para sumar representación. ¿Puede ganar en primera vuelta o será muy difícil que lo logre en la ciudad?
-Vamos a hacer una campaña intensa, en contacto con la gente. En ese coincido con Horacio: acá se ha hecho un trabajo, el voto de la gente nos va a decir si estuvo bien. Esperamos hacer una campaña que sea una conversación con el vecino y todos los ciudadanos para seguir hablando las cosas que queremos hacer en el futuro. El porteño sabe que se han hecho muchas cosas positivas en estos últimos tres años.
-¿La candidatura de José Luis Espert puede complicar también a Larreta? Hay dirigentes que creen que le quitaría puntos y lo llevaría al ballottage.
-Cuando se tiene trayectoria, hitos que fueron marcando el tono, profundidad y contenido de una gestión no hay que estar preocupado por los votos que puede tener Espert, que es producto de una situación particular y mediática.
Si ganaran las otras dos opciones, si se diera ese milagro, ¿quiénes son los que nos van a gobernar? ¿Con qué planes? No hay equipos. Sería un retroceso enorme para la ciudad.
-¿Lammens no está preparado para gobernar la ciudad?
-No, la experiencia de la centroizquierda que une todas las tribus para ganarle al supuesto cuco de la derecha y que después si gana gobierna compartimentando las áreas de gestión entre distintas fuerzas políticas que compiten entre sí, es una experiencia que ya vivimos y fracasó. Si la Ciudad de golpe fuera gobernada por este tipo de centroizquierda, sería una enorme pérdida de tiempo para todos los porteños.