El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, dio por comenzado ayer el "Primer ciclo de formación profesional para personal abocado al poder de policía", que organiza la Secretaría de Gobierno y Control Comunal del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires.
Este ciclo marca el inicio de un programa de formación permanente del personal de las áreas que detentan poder de policía, apuntando de este modo, a la profesionalización de su función.
Acompañado por la titular del área, Silvana Giúdici, Ibarra enfatizó la importancia de este curso de capacitación para todos los inspectores de las diversas áreas.
"Las crisis sociales no se resuelven desde la ilegalidad. Como Gobierno de la ciudad debemos tratar de solucionar los problemas sociales pero no desde la tolerancia de la ilegalidad" afirmó.
Para el titular del Ejecutivo porteño no es un tema menor la presencia del Estado en la vía pública, frente a los vecinos. "Desde mi responsabilidad como jefe de Gobierno -recordó- apunté a reforzar el poder de policía. A concentrarlo porque esto permite realizar modificaciones estructurales en forma más rápida, aprovechar mejor el recurso humano y tener mayor eficiencia". Sin embargo nada de esto se ha verificado hasta ahora y el descontrol reina en la Capital. Todo lo que se clausura se reabre apenas se van los inspectores, y en el caso de la DGVH arrastran encima problemas de conducción con el personal municipal, lo que le quita margen de acción y efectividad
Por supuesto, Ibarra no dejó pasar la oportunidad para quejarse una vez más (y van…) de la crisis económica que atraviesa la Ciudad. "Hoy ser más eficientes es casi una obligación en el marco de los recursos menguados que tenemos", concluyó.
El curso continuará todos los lunes hasta el mes de octubre, por módulos que estarán a cargo de los responsables de las direcciones que tienen poder de policía, que no son otros que los que vienen manejando los operativos desde hace largo tiempo. Por el bien de la ciudad, que presenta actualmente un descontrol exasperante, la ciudadanía espera que la nueva concepción polivalente en la inspección rinda mejores frutos que lo anterior.
En una ambicioso plan, a los 550 inspectores de la Ciudad que asistirán a este curso, se sumarán los cuerpos de inspectores de Avellaneda, Quilmes y Lomas de Zamora.