Desde que la jueza federal con competencia electoral María Servini de Cubría ordenó este lunes suspender las elecciones porteñas, los candidatos a jefe de Gobierno de la Ciudad están desconcertados. El gran perjudicado, Mauricio Macri, dice que recurrirá al Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad para que se respete el cronograma establecido, el titular del Poder Ejecutivo, Aníbal Ibarra, denunció "una maniobra política" del jefe de la SIDE y titular del Partido Justicialista porteño, Miguel Ángel Toma, para favorecer a su partido, y el resto de los postulantes repudiaron el fallo pero están regocijándose con la posibilidad de ser parte importante de los próximos comicios locales.
El candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad por Compromiso para el Cambio, Mauricio Macri, manifestó que el fallo de Servini de Cubría es "un disparate y una burla a los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires". Además informó que se presentará al Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad "para reclamar que se cumpla con el cronograma electoral establecido".
El presidente de Boca agregó: "Si Ibarra no sostiene la fecha para la cual él ha convocado a elecciones será cómplice de la maniobra que denuncia y quedará demostrado que la Ciudad de Buenos Aires aún no es autónoma. El jefe de Gobierno de la Ciudad, que cumpla con lo que ha dicho y ratifique la fecha del 8 de junio; tiene las atribuciones necesarias para ello y la obligación constitucional de defender la autonomía de la Ciudad".
En tanto, el candidato a jefe de Gobierno porteño por Autodeterminación y Libertad, Luis Zamora, indicó: "Nosotros habíamos cuestionado la convocatoria de Ibarra, nos parecía totalmente autoritaria porque no daba casi tiempo para presentar con seriedad toda la lista de candidatos, pero el fallo de Servini de Cubría posterga sin fecha los comicios y crea un lío legal, porque no tiene competencia para resolver sobre el tema de la Ciudad, ya que la institución que debe ocuparse de estas cosas es el Tribunal Superior de Justicia porteño".
"Ahora Ibarra se juntará con Duhalde, con Toma y con Macri, con quienes había discutido la fecha del 9 de junio (Sic) y se pondrán de acuerdo para ver qué fecha les conviene a todos ellos. Lamentablemente ninguno está pensando en qué fecha le conviene al porteño para tener el tiempo suficiente para decidir", teorizó Zamora, que además denunció que la suspensión "se hizo porque el PJ de Capital no tenía candidato".
Por su parte la titular de Unión por Todos, Patricia Bullrich, señaló: "yo había pedido que se postergasen porque la fecha de estas elecciones era un negocio político del jefe de Gobierno, que había hecho elecciones con seis meses de anticipación a la fecha de asunción en la Ciudad de Buenos Aires. Era una irresponsabilidad total y absoluta. Segundo, la Ciudad de Buenos Aires tiene una ley, la 875, que tiene como objetivo que las elecciones porteñas se hagan separadas de las elecciones nacionales para poder debatir los temas de Ciudad concretamente. Esta ley fue absolutamente violada por Ibarra".
"De esta manera -agregó- vamos a tener una elección en un tiempo lógico para que no haya seis meses de transición que es una irresponsabilidad institucional para la Ciudad y segundo, vamos a poder debatir separadamente los temas porteños de la elección nacional. Así que a mí me parece bien, correcto, y totalmente lógico que se tome una decisión de este tipo".
En referencia a la suspensión de las elecciones porteñas, el candidato a jefe de Gobierno por Nueva Dirigencia, Gustavo Beliz, dijo que "todo esto suena a una gran manipulación política. Primero Aníbal Ibarra adelanta las elecciones por temor a perder y ahora este fallo político las atrasa en componenda con el propio Ibarra. Lo más importante es que la ciudad vote en la fecha que vote, lo haga sin listas sábanas y con una reforma electoral en serio".
El recientemente consagrado candidato a jefe de Gobierno por el radicalismo, Cristian Caram, expresó que "si bien la verdad es que no era lógica la fecha del 8 de junio y que a mí personalmente podría convenirme la postergación en virtud de que haya un poco más de tiempo para instalar la propuestas de campaña, es un papelón que la Ciudad termine en el mismo carril que la Nación en este tema del manoseo y el toqueteo del cronograma electoral. En un país serio cuando se pone una fecha de elección sólo se cambia por una guerra o por una catástrofe natural".
En tanto, el dirigente de la mesa nacional de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) Claudio Lozano, posible candidato de los sectores progresistas, afirmó: "Creemos que al gobierno de Aníbal Ibarra que ya había decidido avanzar en un proceso de amordazamiento de la participación ciudadana y de restricción de la discusión de propuesta para la Ciudad, ocultando los comicios locales detrás de los nacionales, le devolvieron con su propia medicina: El Partido Justicialista utilizó sus influencias en la Justicia para manipular la fecha de las elecciones porteñas. La ciudadanía esta harta de este tipo de actitudes basadas en los números de las encuestas".
El precandidato a jefe de Gobierno de la Ciudad por el Movimiento Nacional y Popular, Enrique Rodríguez, sostuvo que "es un pacto entre Ibarra y Duhalde, porque los sectores peronistas que representan no tienen votos en la Ciudad de Buenos Aires. En las últimas encuestas Ibarra ni siquiera media. Exigimos que haya certeza en la fecha de las elecciones y que se unifique la elección entre diputados, legisladores, jefe y vicejefe de Gobierno de la Ciudad, porque el fallo de Servini de Cubría no alcanza a diputados nacionales".
En tanto, la candidata a jefe de Gobierno de la Ciudad por Izquierda Unida, Vilma Ripoll, manifestó: "Es una nueva maniobra para quedarse. Como no hubo acuerdo entre Toma y Macri, operaron para decidir la fecha de las elecciones en que los porteños deben votar. Ibarra, como no le daban los números, también estaba viendo cómo hacer para que se posterguen los comicios. En definitiva, ésta es una medida que favorece a los que se quieren quedar, pero nosotros estamos dispuestos a dar pelea en el momento que decidan".
El precandidato por Acción por la República y diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires, José Luis Fernández Valoni, sostuvo que "la estulticia del jefe de Gobierno en el perfeccionamiento de la autonomía porteña creó las condiciones para que la politización de la Justicia por parte de los que no tienen propuestas se entrecruce con la manipulación de las instituciones y las reglas de juego. Ahora sólo cabe esperar que se suspendan las elecciones a diputados nacionales para que, en 60 o 90 días, la Ciudad pueda debatir su destino a partir de un desdoblamiento verdadero".