Finalmente, el exsenador rionegrino Miguel Ángel Pichetto no presidirá la Auditoría General de la Nación, pese a que en las últimas semanas se especulaba por ser uno de los principales miembros de la oposición.
Se trata de un organismo que tiene rango constitucional desde 1994 y que es manejado por la oposición. Por eso es los dardos apuntaban hacia Pichetto para que dirija la Auditoria, como una especie de retribución por haber jugado para Juntos por el Cambio en las últimas elecciones, según reveló el medio El Cronista.
Sin embargo, no es la oposición en general quien nombra a la máxima autoridad de la AGN. Según el artículo 85 de la Constitución, “el presidente del organismo será designado a propuesta del partido político de oposición con mayor número de legisladores en el Congreso”.
El excompañero de fórmula de Mauricio Macri rechazó la oferta, ya que a los directores se los vota en el recinto y si bien la oposición tiene lugares a ocupar, someter a un debate la figura de Pichetto puede ser un fácil escenario para que el peronismo lo fustigue por su conversión al macrismo.
Por su parte, Alfredo Cornejo, que seguiría como presidente del Comité UCR, no piensa resignar la AGN y si el consenso es por el acto auditor Jesús Rodríguez, de buena relación con todo el arco partidario, peleará por él. Una vez que cierre el acuerdo, se envía una carta al presidente de cada Cámara y un trámite administrativo concluye el ciclo.