La Legislatura aprobó un pedido de informes en el que le solicitó al jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra que, a través del organismo que corresponda, informe dentro del término de quince días, cómo funcionará la nueva Policía Comunitaria y a qué se dedicarán los nóveles 500 uniformados.
Los legisladores quieren saber cómo y en qué lugares prestarían servicio los 500 primeros policías del Gobierno de la Ciudad, cuál será su régimen de servicio (cantidad de turnos, sistema de relevos, etc.), cuál será el esquema de conducción y jerárquico que regirá su accionar, qué requerimientos especiales se han planteado en el esquema de formación previsto a fin de capacitar a esos agentes para las complejas tareas de policía comunitaria, quién tendrá a su cargo la provisión del equipamiento personal (uniformes, armamento, equipos de comunicaciones, protecciones personales, etc.) de esos funcionarios públicos, con qué elementos de movilidad contará ese personal y si ya se ha completado la diagramación del esquema de servicio que corresponde y en caso afirmativo, se solicita la remisión de una copia.
El pedido de informes fue presentado por los diputados de Unión para Recrear Buenos Aires, Jorge San Martino y Carlos Araujo; los legisladores del Frente para la Victoria, Claudio Ferreño y Silvia La Ruffa y los integrantes del Bloque Plural, Juan Manuel Velasco y María Eugenia Estenssoro.
Entre los considerandos destacados por los políticos, el escrito afirma que "tras años de indefiniciones -morosidad y desinterés más bien- por parte de las autoridades del Poder Ejecutivo de la Ciudad, a finales de diciembre de 2003 los ciudadanos porteños hemos al fin tenido noticias acerca de la constitución de lo que podría ser, andando el tiempo, el embrión de una fuerza policial propia para la Ciudad de Buenos Aires. Que con todo lo alentador que resulta que se haya, al fin, iniciado este proceso tan demorado y a la vez tan esperado, son más los interrogantes que las certezas. Al mismo tiempo, hay cuestiones de tipo técnico-policial en la formación, equipamiento, despliegue, movilidad, esquema de mando, etc., de la nueva fuerza, que deben ser atendidas por especialistas en seguridad", señalan los legisladores en una parte de la presentación.
Más adelante los diputados destacan que "por otra parte, no resulta adecuado que estas cuestiones queden exclusivamente a cargo de las autoridades nacionales del sector, que a la fecha pobres muestras han dado de reunir las condiciones técnicas, el empeño personal y la voluntad política necesarias para encarar con éxito el desafío mayor que la seguridad pública hoy representa en nuestro país", remarcan como al pasar los porteños, dando muestras de una clara disconformidad acerca de la manera de manera el tema de seguridad que tienen las autoridades nacionales.
