Según un ranking de costo de la vida que se publica semestralmente, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires pasó de ser la segunda ciudad más cara de la región, a pasar a estar listadas entre las más baratas.
La crisis de balanza de pagos que golpeó a la Argentina en 2018 derrumbó a la Ciudad de Buenos Aires del lugar de una de las ciudades más caras de la región que ocupaba a mediados de 2017, según los datos de una web dedicada a la recolección de información sobre precios de todo el mundo. La Capital de la Argentina hasta hace poco sólo era superada por Montevideo en el “Índice de Costo de Vida” que elabora Numbeo y, ahora, cayó al puesto catorce para terminar listada entre las más baratas.
El Índice de Costo de Vida de Numbeo tiene en cuenta precios de los bienes de consumo, incluyendo alimentos, restaurantes, transporte y servicios públicos de 19 ciudades de América del Sur. El indicador, que se usa para ciudades de todo el mundo, toma al costo de la vida de Nueva York como referencia, al que le asigna un valor de 100. Buenos Aires pasó de estar calificado con un valor del 58,82% a mediados de 2017 a un nivel de 34,58% a inicios de 2020, la última actualización del índice. Es decir que pasó de ser cerca de 40% más barata que Nueva York a ser 65% más económica.
De la misma manera, Argentina pasó de ocupar el puesto 12 entre los países más caros de todo el continente americano a caer al puesto número 25 como resultado del retroceso de su moneda.
Montevideo se mantiene como la ciudad más cara de la región, mientras que destinos que hasta hace poco eran furor entre los argentinos para hacer valer su dinero a la hora de vacacionar o, incluso, aprovechar para hacer compras como Santiago de Chile ganaron varios escalones en el ranking. En sólo dos años y medio, Santiago de Chile pasó de ser la novena ciudad más cara de la región a alcanzar el podio y terminar tecera. No va a haber viajes de compras a Chile por un rato.
Mientras que el índice de alimentos que mide Numbeo pasó de costar el 51,48% de lo que valía comprar los mismos productos en Nueva York a representar poco menos que el 27% de lo que sale en la ciudad de referencia, el índice de precios en restaurantes pasó de ser el 56,77% de su equivalente neoyorquino a significar apenas el 33%.
