Después del escándalo desatado por las imágenes de unas 100 mil computadoras del plan Conectar Igualdad apiladas en un depósito del Correo Argentino en la localidad bonaerense de Tortuguitas, no solo el oficialismo se pronunció preocupados por el suceso sino que el ministro de Educación, Nicolás Trotta, especificó que comenzaría una investigación al respecto.
Ahora, el exministro de esta cartera Alejandro Finocchiaro intentó justificar y aclarar el hecho, por lo cual afirmó que las mismas estaban guardadas allí para ser entregadas este año.
Desde su cuenta de Twitter, el exfuncionario macrista sostuvo que las más de 100 mil computadoras, 2 mil proyectores y 2 mil servidores encontrados por la Sindicatura General de la Nación (Sigen) en un depósito no constituyen “ningún descubrimiento” ya que se trata de un “remanente” de una partida de netbooks distribuidas como parte del programa “Aprender conectados” que se preveía entregar este año 2020 a las escuelas.
Sin embargo, desde la Sigen aseguran que las máquinas fueron fabricadas en el año 2016, por lo que hoy son “tecnología obsoleta” que, por más que se ubiquen en algún destino escolar, no podrán cumplir con el objetivo para el que fueron fabricadas por no haber sido distribuidas en tiempo y forma.
El 16 de septiembre de 2019 la SIGEN solicitó oficialmente a EDUCAR S.E. el stock de netbooks en el depósito de Tortuguitas. Se informaron 238.380 unidades. Es evidente que las 100.000 netbooks encontradas no son ningún “descubrimiento”: son el remanente de las ya distribuidas.
— Alejandro Finocchiaro (@alefinocchiaro) February 1, 2020
El exministro añadió: “Es curioso que la SIGEN haya omitido comunicar que en el depósito también está el equipamiento que necesita el Plan Nacional de Conectividad Escolar (access points, switches, routers, etc.), para terminar de conectar al 100% de las escuelas del sistema de gestión estatal del país”.
Pero luego, pretendiendo dar muestra de eficiencia, detalla que en 2019 se entregaron “más del 60 por ciento” de las netbooks compradas por el Estado y aseguró que “el remanente, de acuerdo al cronograma, debía llegar a las escuelas este año”. Lo que implica el reconocimiento de que el 40% de los equipos comprados no llegaron a su destino original.
Finocchiaro terminó crípticamente su defensa en redes sociales afirmando: “No debemos ser indiferentes cuando se quiere contar como algo malo lo que es bueno, ni cuando se relata como bueno lo que es negativo para la Educación Pública”.