A pocos días de la asunción del nuevo presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, que se celebrará el próximo 1º de marzo, se dio a conocer la lista de invitados que está armando la cancillería uruguaya y la organización de las invitaciones a delegaciones extranjeras corresponde al área de Protocolo de ese ministerio.
Pero hay tres casos que el mismo presidente electo quiso encargarse por su cuenta. El futuro mandatario ordenó que por una decisión personal ni Venezuela, ni Nicaragua, ni Cuba iban a estar invitados al traspaso de la banda presidencial, indicaron fuentes al medio El Observador.
La ceremonia del domingo 1° de marzo está siendo planificada entre gobierno entrante y saliente desde hace varias semanas y una vez que haya sido investido presidente de la República, Lacalle Pou recibirá el saludo de varias delegaciones del extranjero.
Una de las invitaciones que todavía deben resolver es la de Bolivia, por su compleja situación política, en la que hay una presidencia interina tras la renuncia de Evo Morales, que hay quienes califican como un golpe de Estado.
El canciller designado, Ernesto Talvi, dijo días atrás que la invitación o no de Cuba, Nicaragua y Bolivia iba a realizarse en base al artículo 1° de la Carta Democrática Interamericana de la Organización de Estados Americanos. “Los pueblos de América tienen derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y defenderla”, dice esa parte del texto. “La democracia es esencial para el desarrollo social, político y económico de los pueblos de las Américas”, continúa.
De todos modos, Lacalle ganó de mano y ordenó que Cuba y Nicaragua tampoco recibieran invitación para el día en el que portará por primera vez la banda presidencial.