Con una marcha a través del Polo Petroquímico de Dock Sud, que incluyó un paso frente a la empresa Union Carbide, los vecinos de Dock Sud brindaron ayer su testimonio sobre los riesgos de vivir a metros de grandes empresas químicas y petroquímicas. Los activistas de la asociación ecologista Greenpeace y los habitantes de la zona reclamaron que se detenga la continua emisión de contaminantes que afectan la salud de la población.
La marcha de ayer por la tarde culminó con el enterramiento de 750 cruces frente a las empresas del Polo Petroquímico en recuerdo de las víctimas de la tragedia Bhopal – la mayor catástrofe química de la historia – y como símbolo del vivo reclamo de los vecinos de Dock Sud de no verse afectados por un desastre de características mayores.
En las últimas semanas se repitieron incidentes de escapes químicos que obligaron a evacuar en varias oportunidades las escuelas de la zona, llegando el 26 de octubre a tener que dar atención hospitalaria a más de 60 niños.
"Es muy preocupante ver no sólo la concentración de industrias peligrosas sino la existencia de frecuentes incidentes con gases y olores que denotan el potencial de eventos fuera de control en la zona", manifestó la bióloga Verónica Odriozola, especialista en sustancias tóxicas de Greenpeace. "Un accidente importante en una de las empresas de Dock Sud significaría una seria amenaza para la población de Avellaneda y de la ciudad de Buenos Aires", expresó.
Ni los vecinos de Dock Sud ni los de la Ciudad de Buenos Aires tienen información acerca de los riesgos provocados por las empresas de esa zona. Tampoco se conoce su historial de accidentes y escapes, ni el tipo o cantidad de sustancias tóxicas emitidas de manera rutinaria. Sin embargo, la población vive en vilo y se queja de problemas de salud como afecciones respiratorias, alergias y daños en la piel. "Exigimos saber qué contaminantes se manipulan y almacenan en el Polo, así como la atención sanitaria de la población afectada", declaró Jorge Hiquis, de Vecinos en Alerta por la Vida, de Dock Sud.
Ante esta alarmante situación, el Gobierno porteño sigue valiéndose de empresas que funcionan en el Polo Petrquimico de Dock Sud para que realicen la recolección y posterior incineración de los residuos patogénicos que generan los hospitales municipales. En el informe "La Incineración enferma Buenos Aires" Greenpeace afirma que el 82 por ciento de los residuos de los hospitales dependientes del ejecutivo porteño son incinerados, y de esa cifra, el 50 por ciento lo hace la empresa Tri Eco SA.
A principios de este año, Greenpeace había detectado que las cenizas "almacenadas precariamente" en la planta que posee esta empresa en el Polo Petroquímico de Dock Sud, eran "fuertemente tóxicas". Además, se encontraron sedimentos en los alrededores con altos niveles de plomo, cadmio, cromo, cobre y zinc.
DOCK SUD: UNA BOMBA DE TIEMPO A ESCASOS OCHO KILOMETROS DE LA PLAZA DE MAYO
En la zona de Dock Sud se encuentran radicados 50 establecimientos industriales, entre los que se destacan, 2 refinerías de petróleo, 8 plantas de recepción y almacenaje de petróleo y sus derivados, 4 plantas de recepción y almacenaje de productos químicos, un incinerador de residuos peligrosos y una central termoeléctrica. Existen en la zona, además, industrias de procesos, empresas de transporte, amarres, areneras, estaciones de servicio y el relleno sanitario de Villa Domínico. El Polo Petroquímico convive asimismo con un puerto, donde se cargan y descargan materiales peligrosos.
Días atrás, el legislador porteño Miguel Doy (FORJA 2001) se refirió al Polo Petroquímico de Dock Sud como la "caja negra", además propuso que el Gobierno de la Ciudad exija la implementación de un censo de industrias en la zona.
Nadie sabe cual es el alcance que puede tener un accidente en el Polo Petroquímico de Dock Sud, tanto es así que hubo presentaciones ante la Defensoría del Pueblo de la Ciudad para que el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, garantice la seguridad de los habitantes del distrito ante un posible ataque terrorista que tenga como blanco este enigmático aglomerado de industrias químicas.
"NO QUEREMOS SER OTRO BHOPAL"
En la movilización de ayer, los manifestantes expresaron su preocupación ante el creciente numero de accidentes sucedidos en el Polo Petroquímico de Dock Sud. Hace un par de semanas un camión que transportaba productos químicos volcó parte de su contenido en el trayecto y provocó la evacuación de algunas cuadras de La Boca y de Dock Sud.
El 3 de diciembre de 1984 una explosión en la fábrica de pesticidas que la empresa estadounidense Union Carbide operaba en Bhopal, provocó la liberación al ambiente de metil isocianato, matando directamente a una cantidad de entre 3.500 y 7.500 personas, dejando heridas a otras miles. Luego de 17 años, se estima que las muertes como consecuencia directa de la explosión e indirecta por las enfermedades que provocó la contaminación a lo largo de estos años, podrían alcanzar las 20.000 personas.
Greenpeace entregó en la movilización de ayer una carta al Presidente de Dow Chemical en la Argentina, Oscar Vignart, reclamando a esa empresa que se haga cargo del legado tóxico que ha provocado, rehabilitando e indemnizando a las víctimas y removiendo la contaminación que aún persiste y envenena el agua de la que se abastecen miles de familias. La organización ambientalista también realizó actividades también en diversos países del mundo conmemorando el accidente de Bhopal y cooperando con las organizaciones de sobrevivientes en sus reclamos porque Dow tome medidas para evitar mayores perjuicios y resarcir a la comunidad de esa ciudad de la India.
