El legislador porteño del Frente de Todos, Santiago Roberto, se mostró preocupado por la inacción del Gobierno por evitar la propagación del Coronavirus en las villas y cuestionó la Ley de Emergencia que se aprobó en la Legislatura.
También aseguró que el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, tendrá superpoderes con la ley de emergencia económica que aprobó el oficialismo en la Legislatura el jueves pasado para hacer frente a la pandemia del coronavirus.
Roberto considera que el rechazo de la coalición opositora a acompañar la emergencia impulsada por el Ejecutivo no complicará el vínculo entre el presidente Alberto Fernández y Rodríguez Larreta en plena emergencia sanitaria. “Hablan de consensos y reuniones, pero las medidas las toma el Ejecutivo”, afirmó, en diálogo con Noticias Urbanas.
-¿Horacio Rodríguez Larreta tendrá superpoderes con la ley de emergencia económica que aprobó la Legislatura?
-Sí, es una ley que raya lo inconstitucional porque se le están dando superpoderes a Rodríguez Larreta. La Legislatura delega facultades y poderes propios, con el agravante de que se restringen los controles y no especifican adonde se va a destinar esa enorme cantidad de recursos de los que va a disponer el jefe de gobierno.
Desde la oposición fuimos los primeros que planteamos la necesidad de declarar la emergencia económica en la Ciudad. Dijimos que era necesaria, pero no una ley de este tenor. Propiciábamos que se dejara claro que los recursos se iban a destinar para protocolos en los barrios vulnerables, en políticas activas, que es la gran preocupación que tenemos todos.
“La Legislatura delega facultades y poderes propios, con el agravante de que se restringen los controles y no especifican adonde se va a destinar esa enorme cantidad de recursos de los que va a disponer el jefe de gobierno”.
El problema no se acaba en la Villa 31: hay que hacer algo con Ciudad Oculta, la Villa 20 o en el barrio Los Piletones. El Estado no está tomando medidas concretas y, por eso, el virus se está propagando como se está propagando.
En síntesis, entendíamos que había que declarar la emergencia, pero no en estos términos. Esta ley le da una discrecionalidad enorme al jefe de Gobierno y no garantiza que esa discrecionalidad vaya a ser utilizada para combatir el coronavirus. Seguramente, la Legislatura va a autorizar el jueves próximo la excepción al Código para que se puedan construir tres torres de 45 metros en la estación Villa Crespo o el triángulo de Salguero. Hay una enorme cantidad de medidas que está tomando el Ejecutivo que no tienen nada que ver con combatir la pandemia. Ése el temor que tenemos. Por eso no acompañamos la ley de emergencia económica.
-¿El rechazo a la ley del Frente de Todos porteño puede erosionar el vínculo entre Alberto Fernández y Larreta?
-Entiendo que no, porque nuestra postura es clara. Desde que se inició el problema de la pandemia del coronavirus, nosotros hicimos más de 54 propuestas constructivas. Eran ideas para sentarnos en la mesa a debatir cuál era el mejor camino frente a la crisis. Hablan de consensos y reuniones, pero las medidas las toma el Ejecutivo.
Es un momento difícil para todos y queremos participar, pero de una forma efectiva y concreta, no mirando como mandan leyes que no podemos discutir ni modificar.
-¿La ley dificulta la posibilidad de hacer controles estrictos?
-La ley que se votó establece una Comisión Fiscalizadora, pero estará presidida por el oficialismo y contará con mayoría del oficialismo. No va a fiscalizar nada, sino que va a avalar lo que se viene haciendo, como la compra de barbijos con sobreprecios, la contratación de hoteles o el problema con las bolsas alimentarias para colegios públicos. No es una ley que permita un control efectivo. Habíamos pedido una cuenta única para controlar compras. El oficialismo no accedió e hizo esta pseudo comisión.
-¿Hubo fallas del gobierno porteño en el operativo de prevención en las villas de la Ciudad y geriátricos?
-Estoy muy preocupado. No había que ser un experto epidemiológico para saber que el gran problema en nuestra ciudad eran los geriátricos y las villas porteñas. Lamentablemente, los hechos nos están dando la razón. Me preocupa que no se esté haciendo nada en las otras villas, donde hay pocos casos. Los vecinos se organizaron y están trabajando en conjunto, pero quieren que el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) les baje los recursos para hacer sus trabajos barriales.
Hay manzanas de los barrios que no tienen agua. ¿No vamos a hacer nada? Eso estamos reclamando. Me preocupa que se haya actuado tarde en la Villa 31 y en la 1-11-14, pero no se está haciendo nada en el resto de las villas para que no se propague el virus.