Siguiendo el mismo camino que adoptó el Gobierno nacional de Alberto Fernández para renegociar la deuda con los acreedores externos, el gobernador bonaerense Axel Kicillof decidió extender los plazos para la reestructuración de la deuda provincial.
Kicillof decidió extender hasta el 31 de julio la negociación con los acreedores con el propósito de reestructurar unos u$s 7.168 millones. Así lo informó en un comunicado difundido por el Ministerio de Economía y Hacienda de la provincia que encabeza Pablo López.
“La provincia de Buenos Aires informa la extensión del período de presentación de órdenes para canjear los bonos elegibles por nuevos bonos hasta el día 31 de julio”, indicó en un comunicado el Ministerio bonaerense.
“La Provincia va a seguir realizando todos los esfuerzos a su alcance para dar una respuesta definitiva a la sostenibilidad de la deuda”, subrayó el comunicado.
Kicillof insiste en llevar adelante una deuda “sostenible”.
Cuando se anunció la extensión del plazo vencido el viernes, el ministro López sostuvo: “Existe cierto margen para introducir cambios a la invitación y a su vez respetar el marco de sostenibilidad elaborado por la Provincia. En este sentido, hoy el esfuerzo está concentrado en la comunicación de buena fe con todos los actores para poder arribar a la mejor alternativa posible”.
La tercera prórroga en el plazo del vencimiento de negociaciones se había producido el viernes al igual que las tratativas que lleva adelante el Gobierno nacional con los acreedores de la Argentina.
El viernes 19, día de vencimiento de la prórroga, habían surgido firmes expectativas de alcanzar un acuerdo tras la decisión del fondo Fidelity Investments -uno de los más intransigentes- de negociar sus títulos. Cabe recordar que entre los principales acreedores del Estado bonaerense se encuentran Pacific Investment Management Co (PIMCO), Prudential Financial y Candriam Investors Group.
Grieta entre los K: senador bonaerense dice que “la solución de Vicentin no pasa por la expropiación” Por otra parte, el comité directivo del grupo de tenedores de los títulos de deuda externa provinciales que controlan más del 40 por ciento de la deuda rechazó la primera oferta realizada por el Gobierno de Kicillof.