“No hay acuerdo, sí hay una agenda de trabajo. En ningún momento se planteó que los chicos pueden volver a las plazas o patios de las escuelas”, dijo el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta en el canal A24 luego de reunirse con autoridades de la Ciudad el lunes por la tarde.
En principio se había conocido la noticia de que se había llegado a un acuerdo para que 6.000 chicos que se quedaron sin conectividad durante los meses de pandemia tuvieran clases presenciales en los patios de las escuela. Una solución intermedia entre las clases en espacios abiertos que proponía la Ciudad y el no retorno a las aulas que sostenía Nación. Sin embargo, Trotta descartó esa posibilidad.
Trotta, dijo este lunes que “no hay acuerdo” con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para “el retorno a las aulas, ni a patios y a plazas”, y advirtió que sí existe “la voluntad de un trabajo mancomunado”.
Según Nación se buscará analizar la situación epidemiológica de la Ciudad y establecer indicadores epidemiológicos objetivos que permitan trazar una hoja de ruta para la apertura progresiva y escalonada de las actividades escolares sin exponerlos a los riesgos de un posible contagio.
Trotta, explicó que “nunca estuvo en debate la posibilidad del reinicio de clases. Lo que se conversó hoy es cómo logramos que el Gobierno de la Ciudad ponga el foco en los estudiantes que han tenido nulo nivel o muy bajo nivel de contacto con la escuela en estos seis meses”. Y agregó que “el Gobierno de la Ciudad ha establecido que han sido 6.500 chicos de los cuales hasta el momento ha logrado visitar 1.500”.
“Y el segundo aspecto, que sí hemos debatido, es que se reúnan los equipos de Quirós, del Gobierno de la Ciudad y de Ginés González García, Gobierno Nacional, para poder establecer datos objetivos que permitan llevarle tranquilidad a cada una de las familias, estudiantes y docentes de cuándo estaríamos en condiciones de proyectar el regreso a actividades escolares, sin poner en riesgo nuestra comunidad educativa”, dijo el titular del Ministerio de Educación.
Asimismo, según Nicolás Trotta para el regreso de las actividades escolares en zona urbanas “tiene que haber nulo o muy bajo nivel de contagio. Cuestión que no se da en la Ciudad de Buenos Aires, pero sí se ha dado en las cinco provincias que pudieron regresar a las actividades escolares. Tres de ellas tuvieron que retroceder porque cambió la realidad epidemiológica. Que se junten los especialistas y planteen cuál va a ser el camino para acordar datos objetivos que nos de tranquilidad a todos que regresar a actividades escolares no implicaría un riesgo desmedido”.
Trotta aseguró que la diferencia “no es ni partidaria ni ideológica sino epidemiológica”, y amplió: “En la Ciudad hay un amesetamiento de los casos (de coronavirus), pero muy alto”.
“No se llegó a analizar siquiera si plazas o patio. Hoy se llegó a discutir cómo establecemos el acuerdo de lo que debe ser el primer paso a dar, que no es un paso educativo sino epidemiológico” en medio de la pandemia de coronavirus, agregó.
Trotta afirmó que es un tema que “lo van a tener que trabajar el equipo de Salud nacional con el de la Ciudad”, y lo llamó “hoja de ruta”.
El ministro nacional dijo, también, que “hay una agenda de preocupación común en poder desplegar la respuesta necesaria, principalmente para los chicos y chicas que han tenido menor nivel de contacto con la escuela. El Gobierno de la Ciudad plantea que son 6.500”, agregó, de los cuales ya han sido identificados 1.500.
Al referirse a la reunión que mantuvo con su par porteña, Soledad Acuña, consideró que fue “una reunión positiva en cuanto a la voluntad de trabajo mancomunada. Hay muchas miradas distintas, que a partir del diálogo esperamos que se puedan acordar”.
E indicó que “mañana (por este martes) van a empezar a haber reuniones de los equipos epidemiológicos” de los ministerios de Salud de la Nación y la Ciudad para “seguir avanzando en base a observaciones e índices”.
Trotta, por último, resaltó la “voluntad de trabajo mancomunado para dar la respuesta efectiva que los chicos necesitan en un momento de enorme complejidad epidemiológica que está atravesando la ciudad” de Buenos Aires.