En medio de la polémica que se generó y los cruces entre el Gobierno Nacional y el GCBA por el tema de las clases presenciales en el distrito porteño, la ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, se refirió decisión de la Justicia porteña de permitir las clases presenciales en el distritos y dijo que el regreso a las aulas se haya dado de forma dispar. Acerca del tratamiento que está realizando la Corte Suprema de Justicia, la funcionaria sostuvo que si se falla en favor de lo que dicta el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del Gobierno Nacional, acatarán la decisión.
En un reportaje con María Laura Santillán en CNN Radio, Acuña expresó: “Hoy hay una situación dispar en las escuelas porque nos enteramos tarde del fallo de la Justicia”. Y agregó: “Las escuelas no terminaron de abrir, es difícil saber cuántos docentes asistieron”.
Al ser consultada acerca de la posibilidad de que Corte Suprema de Justicia retroceda en su dictamen de avalar las clases presenciales y falle a favor del DNU del Ejecutivo Nacional, la Ministra de Educación porteña consideró que “si la Justicia ordena que demos marcha atrás, lo haremos”.
En otro tramo de la entrevista, Soledad Acuña abordó la posición de los gremios docentes ADEMYS y UTE-CTERA, que llamaron a un paro de 24 horas para decidir qué hacer con la presencialidad en las aulas. Sobre ese punto, sostuvo que “Algunos sindicatos docentes están haciendo política, responden al Gobierno Nacional”.
A propósito, también se había manifestado el diputado Fernando Iglesias, cuando habló de “mafia” para referirse al oficialismo y al secretario general de SUTEBA, Roberto Baradel. Desde la oposición entienden que los gremios docentes están alineados con el Frente de Todos.
Asimismo, Acuña dio cifras sobre los contagios y el movimiento social que genera el desarrollo de las clases presenciales. En ese marco, sostuvo que “abrieron más del 60% de las escuelas” y agregó que “sólo el 0.89% de personas que van a la escuela fueron Covid positivo”.
Sobre la utilización del transporte por parte de alumnos, padres y docentes para asistir a las escuelas, la Ministra de Educación porteña destacó que “sólo un cuarto de las familias utilizan el transporte público para ir al colegio”.
El pasado viernes, el Gobierno Nacional publicó un comunicado oficial donde explicaba que en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se había reducido la circulación de personas en un 50% en el transporte público luego de las restricciones, pasando de 4.242.450 a 2.114.009 de personas.
Al justificar su posición de que las clases tienen que ser en las aulas, Acuña afirmó que no todos los alumnos tienen la posibilidad de aprender de manera virtual. “En primaria se duplicó la cantidad de chicos que pasaron de grado pero en condición de promoción acompañada”, describió la funcionaria. En ese sentido, explicó que es una modalidad de acompañamiento de los docentes aún cuando los alumnos ya avanzaron de grado y que sirve para fijar conocimientos básicos.
Finalmente, la ministra porteña explicó que la virtualidad complejiza la capacidad de aprender de los alumnos por la dificultad de los espacios alfabetizadores, el espacio físico y las rutinas familiares, tres variables que influyen en la educación desde casa. “Necesitamos la presencialidad para que todos tengan la misma oportunidad”, concluyó.