La ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, pidió “disminuir la movilidad, pero dejando las aulas abiertas” y alertó que cerrar ahora las escuelas “es anticipado”, en medio de la escalada de tensión entre el Gobierno Nacional y el porteño.
Acuña resaltó que “en la Ciudad seguimos creyendo que la presencialidad es esencial y que es posible porque los protocolos garantizan que las aulas sean seguras para chicos y para docentes. En el nivel secundario pasamos a una modalidad bimodal, unos días presencial y otros virtual, para ayudar a bajar la circulación de la gente en torno a las escuelas”.
Asimismo, la titular de la cartera educativa porteña subrayó que desde el Gobierno porteño están “esperando la resolución de la Corte Suprema porque está en juego algo muy importante que es la autonomía de la Ciudad. Estamos esperando que ratifiquen lo que dice la Constitución: que en materia de política educativa la Ciudad es autónoma para definir las modalidades del sistema”.
En cuanto a la situación sanitaria de la Ciudad y su relación con la circulación de personas para que los niños acudan a clases, la Ministra expresó: “Tenemos que trabajar sobre la movilidad de la gente, pero manteniendo las aulas abiertas”, indicó y pidió “un esfuerzo más como sociedad para que los chicos vayan a las aulas. Pudimos demostrar que las familias usan en muy poca medida el transporte público, porque las asignaciones de vacantes fueron por cercanía”.
Acuña insistió en que “las aulas tienen que ser lo último que se cierre” ya que “hay medidas anteriores que se tienen que tomar para bajar la curva de contagios. Tomamos medidas de restricción que nos duelen porque dañan la economía pero también lo estamos haciendo para cuidar la educación”.
La Ministra agregó también: “La escuela es mucho más que el lugar donde aprenden contenidos. Este año no podemos cometer el mismo error del año pasado. Si el problema es la circulación, trabajemos para mejorar la circulación, pero no restrinjamos el derecho a la educación después de un año sin clases”.
Por último, la funcionaria porteña manifestó: “Les pedimos a la familia que si tienen temor se acerquen a las escuelas a hablar para que vean cuales son los protocolos, las faltas se toman pero no se les van a computar en términos de sanciones ni de dejarlos libres, no van a ser castigados por eso”.