Los ministros de seguridad de la Nación y Buenos Aires, Sabina Frederic y Sergio Berni, respectivamente se volvieron a cruzar mediáticamente. Y las fricciones entre ellos están cada vez más a la vista.
“Lamentablemente no tenemos el apoyo del Gobierno Nacional de la Seguridad en PBA, Frederic se maneja en PBA como le da la gana”, dijo Berni en en canal de noticias América cuando fue consultado sobre su relación con Frederic. El titular de Seguridad bonaerense fue más allá: “Lamento que le mienta al Presidente porque necesitamos la ayuda del Gobierno Nacional”.
Además, Berni planteó el problema de las recorridas de Frederic en diferentes distritos: “Si cree que puede andar de municipio en municipio repartiendo gendarmes sin articular con la policía bonaerense es porque no entiende de qué se trata la profesión”.
A tal punto se mostró fastidiado que insistió con un pedido directo para Frederic: “No pedimos que nos acompañe sino que no nos entorpezca más”, finalizó.
Días atrás, en diálogo con el canal de noticias IP (Información Periodística), perteneciente al Grupo Octubre, Frederic dijo: “No soy sensible a las críticas de Berni”. Además no titubeó al enfatizar que “las órdenes las damos nosotros porque las fuerzas las conduzco yo. Si Berni quiere ser gobernador, es problema de él”.
El enfrentamiento forma parte de una interna sin fin. Recordemos que cuando se dio la aparición con vida de la pequeña Maia Beloso (que había sido llevada por un captor del lugar donde vivía con su madre) Berni echó al secretario de Seguridad de la Nación, Eduardo Villalba, de una conferencia de prensa en Luján. “¿Qué venís a hacer acá de trajecito, hijo de puta?”, le dijo Berni a Villalba apenas lo visibilizó.
Y continuó: “Vos y tu ministra, que es una inútil, le hacen mal a la policía, no me llamaste en todo el día y ahora venís acá a sacarte la foto, hijo de puta, te voy a cagar a trompadas”.
Sorprendidos, los testigos atinaron a separar a los funcionarios. Villalba quiso apaciguar los ánimos pero Berni estaba enfurecido e incluso llegó a lanzar dos cabezazos. El enojo de Berni se fundamentó en una presunta falta de colaboración de las autoridades nacionales en el operativo de búsqueda de Maia. Cuando vio llegar al colaborador de Frederic, descargó toda su furia.