El Gobierno ya repartió $145.000 millones de los más de $230.000 millones recaudados a través del impuesto a la riqueza en distintos gastos que ya estaban prefijados en la ley que aprobó la implementación de ese tributo extraordinario. El 60% fue destinado a las medidas en el marco del nuevo confinamiento, por lo que unos $400.000 millones de ese paquete deberán ser cubiertos con recaudación.
Del total ingresado al Tesoro, unos $29.000 millones fueron destinados al Ministerio de Salud para la compra de vacunas, medicamentos y elementos de protección, según informó el Palacio de Hacienda. También se prevé la adquisición de insumos críticos para la prevención y la compra y elaboración de equipamiento médico.
Otros $29.000 millones fueron destinados a “sostener el empleo y las remuneraciones de los trabajadores de las micro, pequeñas y medianas empresas en el marco del Programa de Recuperación Productiva (Repro II)”, el plan del Ministerio de Trabajo por el cual el Estado asiste a empresas privadas con el pago de una parte de los salarios.
Por otra parte, una partida de $22.000 millones se dirigieron al Fondo de Integración Socio Urbana (FISU) “para mejorar la salud y las condiciones habitacionales de los habitantes de los barrios populares”, explicó el Ministerio de Economía.
En tanto, se destinaron $29.000 millones al Ministerio de Educación para reforzar el plan Progresar, “que acompaña a las y los estudiantes con un incentivo económico y un importante estímulo personal en todos los niveles de formación durante su trayectoria educativa y/o académica”, apuntó la cartera económica en un comunicado.
Por último, en relación a la política energética, se destinaron $36.000 millones a la Secretaría de Energía para programas y proyectos de exploración, desarrollo y producción de gas natural.
De todos esos programas estimulados con el dinero de la recaudación del impuesto a la riqueza, tres forman parte del paquete de medidas anunciado por el presidente Alberto Fernández como respuesta al confinamiento más estricto que finalizó este domingo.
Esos tres son el refuerzo de fondos para el sistema de salud, el fondeo del programa Repro para pagar salarios del sector privado y el aumento en el monto de las becas Progresar para estudiantes. De esa manera, el 60% de los fondos recaudados -unos $87.000 millones- tuvieron como destino medidas relacionadas a la crisis sanitaria.
El ministro de Economía, Martín Guzman, señaló: “El Aporte Solidario y Extraordinario tiene un gran valor para lidiar con los complejísimos desafíos que trae la pandemia. Nos ayuda a financiar políticas esenciales para sostener a nuestra sociedad de pie, de una forma progresiva, y que ayuda a la estabilidad macroeconómica”.
Guzmán puntualizó: “Valoramos el aporte que sumaron más de 10.000 personas. Ya se recaudaron más de $145.000 millones que están siendo distribuidos de manera inmediata a los destinos específicos establecidos por ley para hacer frente a las urgencias sanitarias y económicas generadas por la pandemia”.