Porque fue de los primeros en entender que el descontento de la gente podría ser una oportunidad electoral y por lanzar su campaña anticipadamente, José Luis Espert se ubicó desde principios de año como un posible imán para las PASO 2021. Incluso se especuló que en torno a su figura podría construirse un frente liberal/de derecha en las principales provincias del país que, aunque sin entrar en la pelea grande, se transformara en la mentada tercera fuerza.
Pero esa idea aglutinadora se esfumó, en sintonía con las dificultades de armado y los egos de muchos de los referentes de estos espacios. Así, Espert decidió negociar su ingreso a la interna de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires. Esta idea finalmente quedó trunca y hoy no está claro cuánto podrá penetrar el economista en la polarización bonaerense, con un competidor “tercerista” como Florencio Randazzo.
Y así, quien ahora aparece como posible sorpresa electoral de las primarias, es Javier Milei, el aliado circunstancial de Espert que se quedó en el terreno donde mejor prenden estos arranques de anti política: la Ciudad de Buenos Aires. El último fin de semana, Milei hizo su lanzamiento en un acto al aire libre multitudinario para la época y con una fortísima repercusión en las redes sociales. Queda la incógnita, claro, de cuánto de eso se terminará materializando en las urnas el 12 de septiembre y, más importante aún, el 14 noviembre.
Tres consultoras midieron en las últimas semanas a Milei, precandidato de La Libertad Avanza.
Estos fueron los números resultantes:
Ricardo Rouvier
El consultor vinculado históricamente al kirchnerismo hizo un relevamiento de 605 casos en la Ciudad. Y allí midió intención de voto. Con 15,6% de indecisos, Milei figura cuarto, con 5,7%, el porcentaje que le alcanzaría en noviembre para obtener una banca de diputado nacional. Encima suyo quedan dos boletas de Juntos por el Cambio (María Eugenia Vidal con 29,7% y Ricardo López Murphy con 8,5%) y la única del Frente de Todos (Leandro Santoro con 23,6%).
CB Consultora Opinión Pública
Es una firma nacida en Córdoba, que presentó un sondeo de 925 casos en CABA, donde midió imagen y potencial electoral de los candidatos (pisos y techos) e intención de voto.
Milei redondeó una valoración positiva de su figura de 38,9% y una negativa casi igual (38,8%) y sumó un piso electoral de 5,3% (“seguramente lo votaré”) y un techo de 24,3% (se agregaron 19 puntos de “podría votarlo”).
Cuando se hizo la consulta por candidato/espacio, otra vez quedó cuarto, con 7,6%, que subieron a 8,8% cuando se proyectaron los indecisos.
Jorge Giacobbe
Es uno de los analistas más conocidos, y a fines de julio presentó un relevamiento de 1.500 casos porteños, donde también evaluó la imagen y la intención de voto de Milei.
En el primer rubro le fue relativamente mal (16,3% de positiva, 26,9% regular y 41,7% negativa), pero otra vez redondeó una buena intención de voto: 7,8%.
El desafío para el referente de Libertad Avanza podría dividirse en dos: por un lado, superar el piso necesario para conseguir una banca (se ponen en juego 13 y con cerca de un 6% podría lograrlo) y por el otro, superar el umbral sintomático de los dos dígitos. En ese caso se hablará sin dudas de “sorpresa” y hasta podría soñar con una segunda banca.
En cambio, si como ocurrió con Espert en 2019, lo suyo queda debajo de los 5 puntos, otra vez volverá a hablarse de un fenómeno mediático y en las redes, que no tuvo correlación en las urnas.
Otra de las incógnitas es qué pasará con la izquierda, que aunque esté en las antípodas ideológicas de Milei, también suele captar el descontento de los jóvenes. En 2017 superaron los 10 puntos, sumando todas las expresiones de ese sector. Habría que ver cuál de estos emergentes se queda con los “rebeldes”.
