Estaban tan cargados de bronca contra una antena de telefonía celular, ubicada en barrio Norte, que fueron hasta la Fundación Ambiente Recursos Naturales. Este grupo de abogados fueron quienes se molestaron en llegar hasta los tribunales. Finalmente obtuvieron de su iniciativa que el Ministro de Medio Ambiente de la Ciudad firmara la orden de apagar la antena de Telecom, cita en Arenales al 1100.
El ministro de Medio Ambiente, Juan Manuel Velasco, explicó este miércoles porque la decisión de apagar una antena celular de las miles que se propagan sin límites.
"La denuncia -manifestó el funcionario a Radio Continental- era que la antena no había cumplido con las condiciones de evaluación de impacto ambiental. Entonces actuamos en consonancia con la decisión judicial aplicando el principio precautorio de la legislación ambiental, que supone que ante cualquier sospecha o posibilidad de que algo esté afectando el medio ambiente se debe limitar sus posibilidades de funcionamiento".
El ministro, que antes de asumir su cargo fue legislador porteño primero por Unión por Todos y luego ARI, aclaró sobre las antenas celulares que "no hay ningún Estado en el mundo, ni ningún estudio científico que haya verificado que son inocuas o no".
A fin de este año la Organización Mundial de la Salud (OMS) debería publicar las conclusiones de un estudio que viene realizando hace más de 5 años respecto de cuál es el límite tolerable de contaminación electromagnética para el cuerpo humano y si las antenas de distinto tipo, ya sea de telefonía celular o de radiofonía o los cables de alta tensión, que también producen contaminación electromagnética.
En Villa Real la Asociación de Fomento Oliverio V Andrade viene reclamando la desactivación de antenas, una de ellas apostada a metros del hospital de agudos Vélez Sárfield. Los vecinos relacionan la aparición de enfermedades como el cáncer, en personas que viven cerca de esa supuesta fuente de contaminación.
