La continuidad de la situación de normal abastecimiento para una adecuada prestación de los servicios dependerá de la evolución de variables como:
La cantidad de pacientes que demandan atención en el sistema. Dada la situación de emergencia económico-social por la que atraviesa el país, se registra un aumento de los pacientes provenientes de otros distritos y con dificultades de cobertura a través de los distintos financiadores como obras sociales, PAMI y empresas de medicina prepaga.
Las condiciones de compra de los insumos que se necesiten para satisfacer las necesidades. Se destaca el retiro de las ofertas por parte de algunas empresas como así también la no aceptación de las órdenes de compra efectuadas por Fondos de Emergencia (uno de los mecanismos habituales de compra que da respuesta a una amplia variedad de insumos y servicios)
La entrega que realice el Ministerio de Salud de la Nación de los medicamentos acordados en el marco de los programas existentes. En particular resulta imprescindible concretar la entrega de los destinados a pacientes con HIV, diabéticos y oncológicos.
Fuentes de la secretaría de Salud porteña confirmaron que están realizando el seguimiento permanente del estado del stock y efectúando las compensaciones necesarias entre los distintos hospitales y que han reorganizado el cuestionado sistema de compras- que realizaba Amanda Rubilar- para adquirir de manera centralizada los insumos críticos e imprescindibles para el sistema. También aseguraron que efectuarán el seguimiento de la evolución de los precios y de ocurrir distorsiones de carácter abusivo por la incidencia en los precios de los componentes importados, se apelará a los instrumentos legales pertinentes a fin de asegurar el normal abastecimiento de insumos críticos.
