La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió y el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron el lunes a solas para bajar el clima de tensión que se generó luego de las últimas declaraciones públicas que hizo la fundadora de la Coalición Cívica, principalmente, las críticas sobre la buena relación que tiene el jefe de Gobierno y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y sobre la campaña de María Eugenia Vidal en la Ciudad de Buenos Aires.
El encuentro fue en la chacra de la exdiputada en Exaltación de la Cruz, donde mantienen encuentros frecuentes para hablar de política. En este caso, había un alerta roja en esa relación tan fluida: las críticas de Carrió causaron un gran malestar en Rodríguez Larreta, en cuyas filas hay quienes sospechan que Mauricio Macri fue el responsable de haberle “llenado la cabeza” a “Lilita” acerca de su vínculo con Massa.
El jefe de Gobierno le habría dicho que sabe que ella tiene una mala relación con el titular de Diputados y que él lo considera un “amigo”, aunque le aclaró que no hay ninguna negociación política entre ambos.
Frente a frente, ambos aclararon la situación y dieron por superada la situación de tirantez que se había instalado. Cerca de Larreta dijeron a Infobae que el encuentro, que duró una hora y media, fue “bueno y cordial”.
Y que incluso se habló de la posibilidad de que sea designado en un puesto importante del gabinete de la Ciudad de Buenos Aires Fernando Sánchez, dirigente de la Coalición Cívica que estaba en el octavo puesto en la lista porteña y no entró en la Cámara de Diputados.
Sánchez figuraba como séptimo candidato en la lista liderada por Vidal para las PASO, pero bajó un escalón para las elecciones legislativas porque en cuarto lugar se sumó Ricardo López Murphy.
En una entrevista con el diario Clarín, Carrió se quejó el sábado pasado de “una lista en la que se hace un amontonamiento y se deja afuera a una persona de una calidad y una formación para dos años difíciles como Fernando Sánchez. Me dolió institucionalmente, no personalmente”.
De acuerdo a las fuentes consultadas por Infobae sobre la tregua con Lilita, del lado del jefe de Gobierno, siempre enemigo de las peleas, lo dan por seguro. Del otro lado, nadie puede garantizar una misión imposible: lograr que la líder de la Coalición Cívica se mantenga en silencio.