En diálogo con Noticias Urbanas, el ex Secretario de Gestión Federal de la Seguridad de la Nación durante el gobierno de Mauricio Macri negó que hubiera tensiones dentro de Juntos por el Cambio y no presentó objeciones al nuevo bloque del radicalismo liderado por Rodrigo de Loredo. No obstante, admitió que ve a Patricia Bullrich como la mejor candidata a Presidente. También, opinó sobre el acuerdo con el FMI y expresó que el oficialismo “parte de una premisa falsa, de que no dejaron una deuda”.
Desde las elecciones, se ha especulado mucho sobre las tensiones dentro de Juntos por el Cambio. Finalmente, surgió un nuevo bloque liderado por Rodrigo de Loredo. ¿Se lo esperaba?
A mí la verdad es que no me gusta opinar sobre la discusión interna de otro partido. Ellos lo han resuelto de esa manera y lo importante es que estén bajo el interbloque de Juntos por el Cambio. La coalición tiene una mirada común sobre el país y sobre la alternativa que debe ser, pero con muchos matices. Y este matiz nuevo dentro del radicalismo es respetable. Nosotros, desde el PRO, no nos metemos en las divergencias y conveniencias de otras fuerzas políticas.
Cuando dice “conveniencias”, ¿a qué se refiere?
Si ellos ven conveniente presentarse en dos bloques distintos del mismo partido, nosotros no vamos a hacer objeciones. Si quieren tener dos presidentes, no vamos a objetar. Tampoco si prefieren uno. Es una discusión interna del radicalismo.
¿Y qué opina de que Martín Tetaz se haya aliado a UCR-Evolución?
Juntos por el Cambio tiene varios bloques. Y hay que pensar que los primeros tres candidatos a diputados de la lista están en diferentes bloques. Juntos por el Cambio es la expresión de varias fuerzas políticas, no una sola. Así como Vidal está en el PRO, Tetaz está ahora en uno de los bloques del radicalismo.
En una reciente entrevista, de Loredo afirmó que Macri, Bullrich y Larreta no van a cumplir ningún rol en el nuevo bloque. En este contexto, ¿cómo ve al PRO en la carrera al 2023?
El PRO tiene su propio bloque. Nosotros hicimos una reunión con Macri, Bullrich y Larreta y también con los diputados y senadores entrantes y salientes, el día lunes seis de diciembre. Con todos ellos tenemos un bloque de cincuenta diputados y uno de nueve senadores. En ese sentido, repito, no tenemos que meternos en las internas ni de Negri, ni de De Loredo, ni de Margarita Stolbizer. El punto en común es la conformación del interbloque, como viene funcionando anteriormente la Cámara y lo seguirá haciendo.
Algunos especulan que estas divisiones fueron producto de malas decisiones que tomó Larreta. ¿Coincide?
No, acá no hubo malas decisiones. Acá, hubo competencia interna en diecisiete provincias, en las PASO. Y ha sido una herramienta fenomenal, que nos ha permitido ganar la elección general, sin contar aquella parte de la ciudadanía que decidió acompañar al gobierno de Alberto Fernández. A la vez, ha sido un mecanismo para dirimir las candidaturas de una forma democrática, que le permitió a la sociedad usar una herramienta que estaba tirada en un cajón. Tan es así que el Presidente salió a decir, el día siguiente de las elecciones, que el propio Frente de Todos iba a usar esta estrategia para futuras elecciones, con el objetivo de potenciar la integración partidaria.
Cristian Ritondo fue ratificado como Jefe del Bloque de Diputados del PRO. ¿Por qué querían removerlo?
Jamás lo quisimos sacar. Es una discusión política. El año pasado, mientras el gobierno le pedía a la gente que se quedara en sus casas, el Presidente hacía fiestas en Olivos. Esto generó que gran parte de la ciudadanía rechazara a una oposición que se mostraba moderada y que compartía algunos denominadores en común con el oficialismo. En ese sentido, la ciudadanía nos pidió una oposición mucho más contestaria y que sea capaz de ponerle límites a la actual gestión. Y lo que queríamos, justamente, es que el bloque representara esa mirada. Creo que eso ha sido comprendido por la mayoría de los integrantes del bloque. Nosotros nunca fuimos por una discusión de cargo. No es el momento para eso.
Pero si no hay tensiones en Juntos por el Cambio y todo parece estar bien, ¿cómo explica las caras largas en el bunker el día de las elecciones generales?
Había caras largas, seguramente, por aquellos candidatos que querían entrar y no pudieron. El resultado, desde nuestra perspectiva, ha sido fantástico. Le ha mostrado al gobierno nacional que, a pesar de que festeje la derrota, la oposición se consolidó con más de ocho millones de votos. Ganamos en trece provincias, mientras que el oficialismo perdió en quince. Después del ballotage de Macri y Scioli, puedo decir que esta ha sido la mejor elección de Juntos por el Cambio. De todas maneras, no festejamos porque la gente no nos votó para que festejemos. Nos votó para ponernos a trabajar inmediatamente en los problemas de la sociedad. Por ejemplo, yo no creo que el Congreso se deba tomar vacaciones, con todo lo que está sucediendo en el país.
Y ahora, pasemos al acuerdo con el FMI. Una de las posturas del oficialismo es que para conseguir dicho acuerdo se debe generar un diálogo con la oposición. ¿Esto no puede generar más tensiones, tanto dentro de Juntos por el Cambio como con el oficialismo?
Que haya moderados y no moderados dentro de la coalición no es una tensión. Simplemente, son diferentes miradas que tienen que convivir. Con respecto al acuerdo, si el Poder Ejecutivo nos envía un proyecto, que hasta ahora desconocemos, lo leeremos, lo analizaremos y si creemos que es bueno par la Argentina, lo acompañaremos. Si no tienen un plan económico realista, si no tienen un proyecto de un país productivo, no lo acompañaremos. Igual, lo primero es que los funcionarios del gobierno se pongan de acuerdo entre ellos.
El gobierno insiste con que los responsables directos de la deuda son ustedes. ¿Que les contestaría?
El gobierno de Mauricio Macri tomó deuda para pagar deuda vieja. El gobierno de Cristina Fernández de Kirchner no se hace cargo de que nos dejaron en default. Hubo que renegociar con los holdouts, cosa que ellos se negaron a hacer. Parten de una premisa falsa, de que no dejaron una deuda, cuando en realidad dejaron una deuda de ochenta y cinco mil millones de dólares. Y Macri tomó cuarenta mil para pagar parte de esos vencimientos. Eso es lo que ha pasado. El problema de la Argentina hoy es que, como no genera confianza, no tiene financiamiento de ningún lado.
Pasando a otro tema: con su “expertise” en el área de Seguridad, ¿qué pretende hacer desde su lugar de diputado para bajar la inseguridad en Argentina?
Yo estoy preparando un proyecto que se llama “Plan Nacional de Seguridad”. Esto lo hago en respuesta a la inacción del Poder Ejecutivo. Este plan incluye diferentes reformas al Código Procesal y Penal. Entre ellas, aplicar la reiterancia en lugar de la reincidencia. Hoy en día, un delincuente es detenido y como un juicio penal dura entre tres y cuatro años, sale por la puerta giratoria porque no se lo considera como un antecedente penal. Respecto a los femicidios, más allá de que tenemos una ley que agrava el delito, no hay un programa integral. Desde lo discursivo sí lo hay, pero la realidad es que el Ministerio de la Mujer se encarga más de gastar dinero en viajes, que en dedicarse a lo que se tiene que dedicar. También, hay que abordar los problemas críticos que tiene la Argentina, como los que se viven en la ciudad de Rosario. Lo mismo con la comarca andina, donde hay una violencia extrema para discutir la soberanía argentina. Y también, hay que tratar el tema del microtráfico, especialmente en el Gran Buenos Aires.
Por último, si tuviese que elegir a un candidato de Juntos por el Cambio para que sea Presidente en el 2023, ¿a quién elegiría?
La verdad es que creo que no es momento para elegir candidatos a Presidente. La ciudadanía no nos está pidiendo eso. Nos está pidiendo una respuesta a los problemas gravísimos que está atravesando: inseguridad, inflación, el millón de niños que quedaron fuera del sistema escolar…pero, por supuesto, yo tengo mi corazón en Patricia Bullrich, que creo que es una buena alternativa para una gran Argentina.