El Frente de Todos quiere apurar la sanción en el Senado de las modificaciones en el impuesto a los Bienes Personales y este miércoles emitió un dictamen en la Comisión de Presupuesto y Hacienda al proyecto aprobado el martes con modificaciones por la Cámara de Diputados con la mira puesta en llevarlo al recinto la semana próxima.
El bloque que conduce José Mayans (Formosa) intentó pedir el tratamiento sobre tablas esta misma semana, pero Juntos por el Cambio se negó a darle los dos tercios para habilitar su debate.
En este contexto recién podría llegar al hemiciclo el próximo 29 del corriente, cuando se cumplirán los siete días que establece el reglamento que deben mediar entre la firma del dictamen y su discusión en el recinto.
El interbloque opositor rechazó con fuertes críticas las modificaciones introducidas por el oficialismo en la Cámara baja e insistió con sancionar los cambios en Bienes Personales tal cual había salido del Senado en octubre último, cuando el propio Frente de Todos impulsó la iniciativa como parte de la campaña electoral para tratar de remontar la dura derrota que había sufrido en las primarias.
Además, cuestionaron la conformación de la Comisión de Presupuesto y Hacienda establecida por decreto de Cristina Kirchner, en la cual el oficialismo mantuvo 9 sobre 19 miembros a pesar de haber perdido la mayoría propia que tenía en la Cámara alta.
El oficialismo de la Cámara alta conformó la Comisión de Presupuesto y Hacienda bajo el mando del riojano Ricardo Guerra, que reemplazó en ese sitial al cordobés Carlos Caserio, quien no pudo renovar su banca en las elecciones de noviembre.
De acuerdo a lo publicado por el diario La Nación, Guerra defendió los cambios introducidos por su bloque en Diputados al considerar que el texto es más progresivo que el aprobado por el Senado, al aliviar a unos 500.000 contribuyentes al elevar el mínimo no imponible de Bienes Personales pero que tiene al equilibrio fiscal al compensar esa menor recaudación con el aumento de las alícuotas para las categorías más altas del gravamen.
El senador manifestó: “Es una ley que otorga un claro concepto de progresividad, básico en lo que es la sana tributación y tiende al equilibrio al incrementar algunas alícuotas a los patrimonios de mayor envergadura que, naturalmente, tienen mayor capacidad contributiva”.
Con esta nueva redacción, le dijo Guerra a La Nación “menos del 2% del padrón, menos de 16.000 contribuyentes” verán aumentado su gravamen, lo que contrapuso con “los 500.000 contribuyentes que serán beneficiados por la suba del mínimo no imponible”.
El proyecto en discusión establece la actualización del mínimo no imponible de Bienes Personales de 2 a 6 millones de pesos y del valor de la vivienda única que queda exenta del gravamen de 18 a 30 millones, tal cual lo había aprobado el Senado a fines de octubre.
Pero, además, el oficialismo le sumó en la Cámara baja un incremento de 1,25 a 1,5% de la alícuota para los patrimonios superiores a los 100 millones y de 1,5 a 1,75% para los que declaren más de 300 millones. Además, eleva a 2,25% la alícuota para los bienes radicados en el exterior que superen los 18 millones.
El encargado de fijar posición por Juntos por el Cambio fue el radical Martín Lousteau quien cuestionó la idea de progresividad sostenida por Guerra al sostener: “Si lo que queremos desde el punto de vista de la progresividad de la escala del impuesto a la ganancias a partir de determinado nivel gravar con alícuotas crecientes, deberíamos establecer cuál es ese nivel y actualizarlo automáticamente, no debería estar delegada en nadie”.