Más de 1.200 personas participaron en la jornada convocada por la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Buenos Aires bajo el lema "Necesitamos ser Nación", que tuvo lugar en el Colegio de San Cayetano, anexo a la parroquia y al santuario. Las conclusiones del día las realizó el cardenal Jorge Bergoglio, quien también ofició la misa de cierre.
Desde las 10 de la mañana hasta la tarde se dieron cita políticos, militantes sociales y parroquiales de todas las edades.
Por la mañana se realizaron dos mesas de análisis. El primer panel estuvo a cargo de Santiago Kovadlof, Enrique del Percio y Diego Fares. El segundo fue compuesto por Ricardo Rouvier, José Paradiso e Ignacio Chojo Ortiz. Por la tarde, 14 comisiones de trabajo terminaron de desgranar los temas que inquietan a la ciudadanía porteña.
A la Jornada asistieron el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra; el jefe de Gabinete porteño, Raúl Fernández, y los secretarios Eduardo Epszteyn (Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable) y Alfredo Stern (Salud). También fueron de la partida la subsecretaria de Gestión Social y Comunitaria, Mónica Desperbásques; el subsecretario de Emergencia Habitacional, Víctor Colombano;, el director general de Tercera Edad, Daniel Maglioco, y la directora general de Coordinación y Seguimiento de la Jefatura de Gabinete, Sandra Castillo. En representación de la Nación concurrió, entre otros, el viceministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo.
A su vez, varios legisladores se hicieron presentes, entre ellos, Santiago de Estrada, Gabriela Michetti, Sandra Dosch, Jorge Enríquez, Sandra Bergenfeld, Eduardo Lorenzo Borocotó, Helio Rebot, María Soledad Acuña, Marcos Peña, Claudio Ferreño y Diego Kravetz. También asistieron gremialistas de varias procedencias, como Carlos Ferreres y Claudio Heredia, de la CTA, y Alejandro Amor, de SUTECBA. La Defensoría del Pueblo de la Ciudad, por su parte, se hizo presente a través de su titular Alicia Pierini, del especialista en tercera edad, Eugenio Semino y de otros colaboradores.
En su discurso de cierre, Monseñor Bergoglio instó a "recuperar la utopía", ya que -dijo- "el pueblo está caminando, pero debe tener claro hacia dónde, porque el camino ha de tener una dirección, un sentido, para no perderse en él". Puso el ejemplo del pueblo de Paraguay, que luego de la derrota en la guerra con la que quisieron aniquilarlo (la de la Triple Alianza), se reconstruyó a partir de asumirse como nación y como pueblo. "Su contracara -amplió- es la torre de Babel, donde cada uno habla un idioma diferente y sólo logran autodestruirse". Con esta idea, Bergoglio dio por finalizada la séptima edición de la Jornada de Pastoral Social.