Treinta años del golpe: Reflexión, Memoria y Nunca Más

El 24 de Marzo de 1976 se instaló en la Argentina un gobierno de facto en el poder autodenominado Proceso de Reorganización Nacional. Para su instauración fue necesario el derrocamiento de la entonces presidente María Estela Martínez de Perón y una realidad política en ebullición revolucionaria que se desplomaba a puro plomo. La cacería humana desatada sobre las organizaciones políticas y políticas militares (OPM) se refleja en los números -del campo de las víctimas de la tragedia - que vivió esta Nación: más de 10.000 presos ilegales, casi 10.000 muertos en combate o fusilados y 12.000 desaparecidos, que generan aproximadamente el triste "cliché numérico" de los 30.000 del Nunca Más. La Juventud Peronista y la OPM, FAR/Montoneros, fueron el objetivo central a desarticular por la dictadura. Su trabajo diario, su compromiso militante basado en el mayo francés y los aguerridos "militantes del 70, hijos de la resistencia" de acá, la importante movilización y sobre todo la penetración social inclusiva, amenzaban el país para pocos del que gozaron los golpistas cívico militares hasta casi mediados del siglo pasado. También fueron objeto de persecución y muerte la mayoría de los sectores de izquierda y especialmente comprometida su expresión armada más notoria, el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). El proyecto oligárquico militar creyó que la victoria militar sobre un enemigo infinitamente menor en su capacidad de combate pero enormemente superior en convicción e ideales, constituiría a partir del exterminio casi total, el capítulo final de la historia de desencuentros políticos entre el pueblo y oligarquía. Treinta años después, los trabajadores, empresarios y dirigentes militantes de la vida decimos "Presente" a nuestros compañeros caídos y sobrevivientes y nos comprometemos ante ellos en continuar la lucha por conseguir el objetivo que motivó su martirio, la felicidad y el desarrollo pleno de todo el pueblo argentino. Este medio de comunicación se suma a la reflexión, a la verdadera memoria acerca de qué proyecto se abortó y quienes lo llevaban adelante, esa verdad que hoy se encuentra debatiendo el conjunto de la sociedad Argentina. Cómo y para qué se construye un Nunca Más.