Algunos de los más renombrados intendentes peronistas, luego de la derrota del Frente de Todos en las legislativas de 2021, se tomaron licencia para desembarcar en diversas áreas del Ejecutivo provincial, en lo que fue leído como una suerte intervención del kirchnerismo en la gestión del no menos kirchnerista Axel Kicillof.
Otros jefes comunales habían hecho algo similar en etapas distintas -y por circunstancias diferentes- en el Gobierno nacional. El resultado hoy parece ser el mismo. La interna oficial, que se agravó con la salida de Martín Guzmán del Gabinete, junto con los magros intentos por torcer el rumbo de una economía erosionada por la inflación, modificaron la estrategia electoral de muchos de estos dirigentes, quienes pueden volver a presentarse a una nueva elección en su distrito el año que viene, debido al cambio de la ley, que limitaba los mandatos de jefes comunales a dos períodos consecutivos, corriendo a partir del año 2015.
Si bien el 2023 aún parece lejano, el panorama para el FdT a nivel nacional no augura buenos resultados, con una coalición que cruje a instancias de sus principales figuras, Cristina Kirchner y Alberto Fernández.
Por eso, los jefes comunales que habían dado el salto comenzaron a seguir de cerca la gestión en sus territorios, pensando en una estrategia de repliegue en la Provincia, despegándose de la figura del Presidente y evaluando una tentativa candidatura de Cristina a senadora y de Kicillof yendo por otro mandato. El objetivo que importa ahora es defender y garantizar el pago chico.
Nación
El primero en desembarcar en el Gobierno nacional había sido en diciembre de 2019 Gabriel Katopodis, quien pese a que había ser reelecto en San Martín, aceptó la oferta para asumir como ministro de Obras Pública. Al año siguiente, Jorge Ferraresi, vicepresidente del Instituto Patria, fue al ministerio de Hábitat y Desarrollo Territorial y dejó a Alejo Chornobroff, al frente de uno de los distritos claves del conurbano: Avellaneda. Se trató de la primera baja de una albertista (María Eugenia Bielsa), ya entonces apuntada como una de las funcionarias que no funcionaba.
Magdalena Sierra, esposa de Ferraresi y actual jefa de Gabinete del municipio podría ser una opción en 2023, dentro del armado de su marido, que en 2011 asumió como jefe comunal. El senador bonaerense y dirigente de La Cámpora, Emanuel González Santalla, también quiere dar pelea a esa postulación.
En Hurlingham se dio un caso más complejo. Antes de la elección intermedia, renunció para ser candidato el entonces ministro de Desarrollo Social de la Nación Daniel Arroyo y lo reemplazó el intendente Juan Zabaleta, quien debió dejar al frente del municipio al concejal Damián Selci, un camporista con quien venía enfrentado.
Rumbo a 2023, Selci quiere seguir y Zabaleta desea volver. Por eso, el ministro, uno de los albertistas duros hasta hace algunos meses, ya decidió reagruparse en el PJ bonaerense debajo del paraguas de Máximo Kirchner. ¿Aprendió del pasado? En 2017, fue uno de los pocos jefes comunales que acompañó a Florencio Randazzo en la aventura contra Cristina Kirchner por una banca en el Senado.
Otro había sido Katopodis, que debe definir qué camino tomar. Por ahora, en San Martín gestiona el intendente interino Fernando Moreira. El ministro amagó con intentar una candidatura a gobernador, pero la mala imagen del Gobierno abre muchas dudas.
Ariel Sujarchuk fue una de las voces cantantes que pidió cambiar la norma que limitaba la segunda reelección de los intendentes, por lo que se da por sentado que vaya por un nuevo mandato en 2023 en Escobar. Allí se tomó licencia el año pasado para ocupar la jefatura del Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable y dejó en funciones a Carlos Ramil. Días atrás, Sujarchuk participó junto al presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, de un acto en el microestadio de la ciudad de Garín, donde repasó logros de su gestión y abogó por la unidad del peronismo.
Provincia
Pese a la “remontada” del oficialismo en territorio bonaerense, en el Gabinete de Kicillof desembarcó Martín Insaurralde en septiembre del 2021 para ser Jefe de Gabinete. El intendente de Lomas de Zamora con licencia espera definiciones en el seno del peronismo provincial, debido a que si Kicillof no va por la reelección, buscará postularse para la Gobernación. Mientras, su mano derecha y presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Federico Otermín, encabeza recorridas y actividades en el distrito.
Leonardo Nardini, en tanto, solicitó una licencia como jefe comunal de Malvinas Argentinas en 2021, para asumir como ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia. El municipio es gestionado por Noelia Correa, monitoreada celosamente por el propio Nardini.
Para los comicios de 2021, Mariano Cascallares se tomó licencia como intendente de Almirante Brown, para entrar en la lista a diputado provincial por el FdT. Actualmente, intercala sus actividades legislativas con actividades en el municipio, junto al jefe comunal interino, Juan Fabiani. En el distrito, el camporista y secretario del Interior de la Nación, José Lepere, quiere desembarcar con la venia de Eduardo “Wado” de Pedro. Entretanto, Cascallares tiene mandato hasta 2025 como diputado provincial.
El grueso de los jefes comunales bonaerenses de primera línea aceptó gustoso tomar licencia antes de cumplir los dos años de su segundo mandato, porque eso les hubiera permitido buscar otro período, si no salía la ley. Con la norma modificada, no hará falta.
Juntos por el Cambio
Jorge Macri se tomó licencia como intendente de Vicente López para asumir como ministro de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en una apuesta por posicionarse como el sucesor de Horacio Rodríguez Larreta.
El PRO quiere una PASO con Jorge Macri (el primo de Mauricio), Fernán Quirós y Soledad Acuña para la sucesión de Larreta, en la que también suena el nombre de María Eugenia Vidal. En el municipio, Mientras tanto, la mano derecha de Macri, Soledad Martínez, es la elegida para continuar con la gestión, que se inició en 2011.
