El secretario general de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban “el Gringo” Castro acompañado por otros dirigentes de los movimientos populares marchó con la Unidad Piquetera por el “avasallamiento judicial contra comedores y merenderos”.
Castro aseveró este miércoles, frente a la Casa de la provincia de Jujuy, ubicada en Avenida Santa Fe casi Avenida 9 de Julio, que “nosotros necesitamos darle una luz de esperanza a muchos compañeros y compañeras que están atravesando una situación muy difícil. Hubo allanamientos en comedores y merenderos que son el núcleo de nuestras organizaciones. Que no aflojaron ni en pandemia, que fueron capaces de dar de comer, cuidar y organizar la vida de millones de personas. Esto es lo que hoy ataca el poder fáctico: económico y político que se pusieron de acuerdo en avasallar a los pobres. Por eso estamos construyendo la unidad para no permitir el avasallamiento del poder judicial y político. Esta unidad debemos cuidarla”.
La Casa de Jujuy estaba vallada y rodeada de policías, por lo que en la calle, sin escenario, se fueron dando los discurso, entre ellos del dirigente Castro, franqueado por una imagen de la Virgen de Luján frente a los carteles del Partido Obrero, y acompañado por otros dirigentes de la UTEP como Dina Sánchez (secretaria adjunta y miembro del Frente Darío Santillán), Gildo Onorato (secretario gremial y Movimiento Evita), y de la Corriente Clasista y Combativa que habían concentrado en el Obelisco a las 11 horas y marcharon junto a la Unidad Piquetera (que integra el PO, MST, PTS y Barrios de Pie) más el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL).
“En esto quiero plantear más unidad. Tenemos que construir unidad contra los formadores de precios. Tenemos matices, pero debemos ponernos de acuerdo. Porque cada vez que logramos un avance salarial los formadores de precios nos quitan nuestro salario. Le tenemos que poner límite al empresario que se cree que tiene derecho en decir quien y no come en la Argentina”, agregó el secretario general de la UTEP y miembro del Movimiento Misioneros de Francisco.
Al finalizar reconoció Esteban “Gringo” Castro que se siente en “deuda con Milagro Sala que no está libre. Hace siete años presa por hacer viviendas, piletas y trabajar sobre las necesidades de los pobres. No puede ser que siga presa. Tenemos que resolver su libertad de alguna manera”.