Hoy será un día largo, sí señor. Sólo han pasado dos testigos de los 11 que tendrán que declarar este miércoles 1 de febrero y los testimonios prometen ser importantes para la causa.
En prinicipio, el segundo testigo del día, el ex secretario de Seguridad porteño, Juan José Álvarez, se presentó a prestar declaración frente a la Sala Juzgadora a pesar de no haber recibido la cédula de citación de la Legislatura porteña y ratificó que los inspectores de la Ciudad tenían poder de policía, que la normativa vigente permitía clausurar y que la falta de certificado de bomberos era justificativo de clausura.
Cerca de las 13, el ex funcionario porteño comenzó diciendo: "Quiero que entiendan que mi gestión (duró 4 meses) estuvo marcada porque la sociedad puso en la agenda pública de la discusión el problema de la Seguridad". Y, más adelante expresó: "Es importante que entiendan que nuestro criterio para accionar estaba sesgado en función de lo que teníamos que resolver".
El actual diputado, dijo a los diputados acusadores, a la defensa, a la Sala Juzgadora y a quien lo escuchase: "Había que hacerse cargo con lo que había" y "había mucho por hacer y se intentó. Seguramente la gestión de Gorgal lo ha mejorado".
Así planteadas las cosas, Álvarez pudo explicar que con la normativa vigente pudieron "ejecutar más de 500 clausuras aunque eso no significa que la normativa fuera la más adecuada", que por decisión de él "se incorporó el área de control de emergencias", así como también se determinaron "los puntos críticos de la Ciudad".
Por otra parte, el testigo manifestó que se desde que asumió en el cargo, el 7 de enero de 2005, se reunía "constantemente" con el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra y que la gran cantidad de inspecciones se debió a que tenían que "dar la sensación de que la Ciudad recuperaba el poder de la inspección".
Respecto del punto conflictivo del poder de la policía de los inspectores Álvarez ratificó que "en el momento de clausurar si el inspector que concurría al lugar creía que tenía que clausurar no debía consultar, lo debía hacer". Así también aseveró que "la falta de certificado de bomberos era justificativo de cierre". A lo que la fiscalía aprovechó para hacerle recordar que "Cromañón no tenía el certificado de bomberos".