Con la presencia de aproximadamente trescientos comensales se lanzó este jueves en un coqueto restaurante cubano de Puerto Madero el Movimiento Desarrollo y Libertad que lidera Alberto Cormillot. Esta agrupación toma el nombre de un libro del escritor y economista indio, Amartya Sen, quien obtuvo el Premio Nóbel de Economía en 1998 por sus contribuciones a la economía del bienestar. Cormillot coincide con el autor de este libro en que tener libertad para votar no es democracia, porque este último concepto es mucho más amplio.
Es probable que Cormillot se presente como precandidato a jefe de Gobierno porteño en el adolfismo, pero esto dependerá del trabajo y de los informes que realicen sus colaboradores acerca de las iniciativas que planteó para resolver los problemas de la Ciudad. Para trabajar en este ámbito, el médico creó junto a un grupo de colaboradores -entre los que se encuentran el actor Paco Fernández de Rosa y el auditor Daniel Rodríguez Paz-, el partido Democracia Ciudadana y Participativa que, pese a ser una redundancia conceptual, resume una expresión de democracia participativa que Cormillot quiere resaltar.
Según las respuestas de sus allegados y a partir de la manera en que se vayan resolviendo las internas en el adolfismo porteño -que tienen como protagonistas al líder sindical de los judiciales Julio Piumatto, al gremialista Alejandro Amor, al ex ministro de Trabajo Enrique Rodríguez y muy posiblemente "al hombre" que Aldo Rico incorpore- es que Alberto Cormillot definirá entre el 15 y el 20 de marzo su postulación.
Entretanto, propuso la urbanización de la villa del Bajo Flores y de los márgenes del Riachuelo, el soterramiento de los trenes, la construcción de un lago aliviador en la costa del Río de la Plata, el traspaso de la Policía Federal con su correspondiente presupuesto y que se ponga en práctica un plan de comunicación que vincule a los vecinos con el Gobierno de la Ciudad. Se mostró de acuerdo con los postulados del Plan Fénix y manifestó que las personas que se atienden en los hospitales porteños deberían tener algún tipo de documentación que acredite su identidad.
"Soy un convencido de que si hay un elemento que puede cambiar el país es la educación. La alfabetización es absolutamente indispensable, hay que ser intolerantes con la falta de educación", afirmó Cormillot, al tiempo que señaló que debe realizarse una profunda reforma universitaria. En tanto, también afirmó que hay que dar educación para la salud, realizar campañas de prevención y encaminar la salud reproductiva.
SIN MENÚ LIGHT
Muchas de las trescientas personas que concurrieron al acto no se sintieron demasiado cómodas en lanzar un espacio que se dice nacional y popular en un ámbito poco ameno con estos principios. Además, algunos comensales se mostraron sorprendidos de que el ex colaborador de Carlos Grosso haya elegido ñoquis con salsa mixta como segundo plato, incluso hubo quienes, entre carcajadas, manifestaron: "Cormillot lanzó su agrupación entre ñoquis".
Luego de algunos chistes de sobremesa, el ex "Grande Pá" Fernández de Rosa presentó a Cormillot con un breve discurso acerca de cómo la gran cantidad de nuevas agrupaciones que aglutinan a viejos políticos generaron en él desánimo y frustración, y de qué manera este grupo de dirigentes comenzó a trabajar en este espacio que lo hizo recobrar la esperanza para asumir un nuevo compromiso.
"Buenos Aires debe ser una capital cultural de excelencia, con prioridades en educación, salud y seguridad social. Que desarrolle el turismo, que fomente la equidad entre el norte y el sur y que siga siendo la capital de la Republica Argentina", dijo Cormillot. Además agregó: "Para hacer cambios hay resistencia, hasta en los más deseados por toda la población. Pero pese a estas dificultades hay que hacer cambios fuertes en la Ciudad de Buenos Aires".
"Somos los únicos culpables de lo que ha pasado en el país -manifestó el dirigente adolfista-, hay que dejar de buscar responsables afuera. Elegí meterme en la política por compromiso con las cosas que están pasando porque la realidad se hace intolerable. Creo que puedo aportar capacidad de gestión, de conducción y creatividad".