A las 9 de este martes en Bolívar al 600 llegaron los efectivos de infantería de la Policía Federal al mando de la comisaría 2ª y desde entonces, hasta las 16, en una tensa calma esperan que las familias abandonen la vivienda que ocuparon hace más de un año.
El objetivo de los federales es hacer cumplir una orden de desalojo que dictó la titular del juzgado de instrucción N° 13, a cargo de Patricia Nichandu. "Es increíble la arbitrariedad. Las clases terminan el 8 de diciembre no hoy. Pedimos una prórroga porque 30 chicos ven afectada la continuidad escolar. La insensibilidad del juzgado es inaceptable", expresó a NOTICIAS URBANAS, una integrante de la Coordinadora de Inquilinos de Buenos Aires (CIBA).
En Bolívar 684, entre Chile y México que actualmente se encuentran bloqueadas por la policía, viven 16 familias. Las familias se niegan a abandonar el inmueble, "lo que ofrece el Gobierno de la Ciudad son 450 pesos, que alcanza nada más que para ir a dormir a la calle", afirmó Gabriela desde la sede de CIBA, en Anchorena 76, que permanentemente mantiene contacto con la abogada que los patrocina, Fernanda Pereyra.
