La Asamblea de Gobernadores votó este lunes la destitución del presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Mauricio Claver Carone, y así el funcionario estadounidense de origen cubano dejará su puesto envuelto en un escándalo de un romance prohibido con una alta funcionaria del organismo. Se abre ahora una etapa de 45 días para que se presenten postulaciones para su reemplazo.
La votación que venía desarrollándose desde el miércoles culminó este lunes a favor de la destitución de Claver que ya tenía su suerte prácticamente sellada cuando el jueves pasado el directorio ejecutivo dijo que había evidencias suficientes en una investigación que lo complicaba.
El board pasó entonces la decisión final a la Asamblea de Gobernadores, formada por los ministros de Economía de los países de la región, que votaron virtualmente durante el fin de semana. El ministro Sergio Massa votó el sábado y este lunes se terminó el proceso que dictaminó la salida de Claver, de 47 años, el primer estadounidense que presidió el BID, un organismo que por tradición debe ser dirigido por un latinoamericano.
La votación en la Asamblea se habría decidido por unanimidad de los 48 países. Solo hacía falta mayoría de países con poder de voto (Estados unidos, Brasil y Argentina suman el 58%) más 15 estados que avalaran la medida.
Claver-Carone dijo a la agencia Reuters que se le había negado el debido proceso en el manejo por parte del banco de las denuncias en su contra. Y anticipó que tenía previsto iniciar acciones legales contra la entidad por incumplimiento de contrato, y que evalúa presentar una demanda por difamación.
La dirección del BID queda por ahora en manos de la vice, la hondureña Reina Irene Mejía Chacón. En los próximos 45 días deben presentarse los candidatos para la presidencia. Los países pueden postular candidatos, que deben presentar su programa y propuesta de acción y a la vez conseguir el respaldo de una mayoría de países. Pero es posible que surja alguno de consenso. Luego hay un período de 15 días para la votación.
La causa
El contenido del informe, sostiene que el presidente y la jefa de gabinete mantenían una relación amorosa, algo prohibido por la política interna del organismo multilateral. En estos dos años de Claver-Carone como presidente, la mujer, J. B, obtuvo dos aumentos salariales.
El presidente negaba todas las acusaciones, pero el relato de los hechos que ha recopilado la firma de abogados Davis Polk & Wardwell en su investigación, incluidos algunos mensajes bastante explícitos, dejaban poco lugar a dudas. Además, Claver-Carone no permitió a los investigadores el acceso a su teléfono móvil ni sus mensajes de correo electrónico.
“Hay evidencias que apoyan la conclusión de que tenían una relación romántica antes de unirse al Banco y que la relación puede haber continuado durante su empleo”, dice el informe. En menos de un año, el presidente aprobó dos aumentos salariales para J. B, el primero nada más llegar. La mujer fue contratada el 23 de septiembre de 2020 por un sueldo anual neto de 287.000 dólares (una cifra similar en euros al cambio actual). Una semana después, el 1 de octubre, Claver-Carone aprueba un aumento del 20%, hasta los 350.000 dólares. En julio de 2021, el presidente vuelve a firmar una nueva subida del 20%, hasta 420.000 dólares.
Pese a todos los hallazgos en su contra, Claver-Carone lanzó un largo comunicado el pasado martes en el que sostenía que lo que ponía en peligro la reputación del BID era la investigación y no su conducta. “Es la primera vez en la historia de cualquier banco multilateral de desarrollo que esta clase de proceso se lleva a cabo, donde un líder electo ha sido objeto de una investigación arbitraria sin ninguna denuncia formal dentro de las normas administrativas de la organización, y que se inició sobre la base de denuncias anónimas y sin fundamento. No tiene precedentes”, se quejaba.