El líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois, llegó el martes a la estancia Lago Escondido, propiedad del británico Joe Lewis, en la provincia de Río Negro, con el objetivo de montar un campamento a modo de protesta.
La situación no tardó en ponerse tensa y el líder del MTE tuvo encontronazos tanto con los trabajadores del lugar como con la policía.
“Yo sé ustedes que tienen un empleado inglés. Sé que están laburando y sé que no es su culpa”, aclaró el dirigente kirchnerista mientras se dirigía al grupo de trabajadores que resguarda la estancia, aunque luego agregó: “El inglés los desprecia a ustedes igual que nos despreciamos a nosotros eh”.
Además, le remarcó a los trabajadores de Lago Escondido que su empleador “no les va a dar un aumento y no les va a dar un premio. Los detesta, les paga poco, los tiene laburando en condiciones de mierda”, añadió y le cuestionó a uno de ellos: “¿Sos argentino o sos inglés?”.
Los empleados del lugar deciden encender los aspersores para “obligar” a la gente a desconcentrarse del lugar, lo que ocasionalmente se incrementara el enojo de Grabois, quien les dijo que “le faltaba el respeto a la gente”.
“Lamentablemente vos le estás laburando a un gringo que te desprecia y ahora nos estás despreciando a nosotros que tenemos el mismo color de piel que vos”, reclamó el líder el MTE. Ante dicha situación, el empleado le respondió: “Yo estoy laburando loco. Laburamos todos los días del año para mantener a nuestras familias”, a lo que el militante agregó: “Me parece bien, todos laburamos, pero el agua es de todos” .
“¿Por qué no vienen cuando hay un incendio? ¿Por qué no vienen cuando hay un metro de nieve y la gente no puede salir?”, le retrucó el trabajador del lugar. Frente a esto, el dirigente kirchnerista cuestionó: “¿A vos te parece bien que el lago lo tenga el inglés? Yo entiendo que le tengas que chupar las medias, pero él te odia, te desprecia”.
Luego concluyó: “Si hay alguno que tiene espíritu de inglés, que se vaya a Inglaterra ya otra cosa. Pero a la inmensa mayoría que deben ser iguales de argentinos que nosotros y querer a la Patria como nosotros, les pedimos mil disculpas por las molestas “.
Ya izamos la bandera en territorio nacional ¡Recuperemos lo nuestro! pic.twitter.com/TYyppK91br
— Juan Grabois (@JuanGrabois) December 27, 2022
El levantamiento del acampe
“Nosotros vinimos con un objetivo que era pasar 24 horas en territorio nacional, en Lago escondido. Cualquier abogado sabe que los lagos y sus costas son propiedad y patrimonio de todo el pueblo. Nadie tiene derecho a cerrar sus accesos”, comenzó su discurso Grabois.
Y agregó: “Hay un fallo de 2002 confirmado en 2012 para abrir una acceso público para que cualquier familia pueda ir a tomar mate y a disfrutar del Lago Escondido, que es uno de los más hermosos que tiene nuestro país”.
Tras ello, se jactó de que a través de su accionar “por primera vez un contingente, sin tener que ir a pedir permiso a un grupo empresario britanico que compró tierras de manera fraudulenta”, pudo pasar un día en el lugar, disfrutar del lago y llevar adelante una “acción de reafirmación de nuestra soberanía”.
Grabois reconoció que hubo muchos “momentos de tensión” como consecuencia del operativo de seguridad que se montó a raíz de su ingreso al predio. “Están acostumbrados a funcionar como un Estado paralelo y había una especie de comando unificado entre la patota de Lewis y la Policía de Río Negro. Querían sacarnos de los 15 metros que nos corresponden. Entonces, decidimos plantar la bandera argentina y a partir de ese momento se tranquilizó la cosa (…) De ese lugar nos vamos cuando queremos”, afirmó.
Además, dijo que al “reafirmar la soberanía” territorial tanto él como el resto de los manifestantes lograron poner en evidencia “por qué están tan obsesionados en mantenerlo como una especie de escondite o de cueva. Eso tiene que ver con las reuniones que se hacen ahí. Por ahí pasaron Mauricio Macri, jueces de la Corte, los principales políticos vendepatria, jefes de las fuerzas de seguridad y los dueños de los principales medios de comunicación. Funciona como una Casa Rosada paralela”, aseveró.
Por último, advirtió: “Con la poquita fuerza que tenemos, que son nuestros cuerpos, nuestros principios y convicciones, pudimos lograr recuperar ese pedazo de soberanía que nos robó el invasor inglés. Vamos a volver a hacerlo todas las veces que sea necesario, acá o en cualquier otro territorio donde se esté violando la soberanía, reclamando también y visibilizando la injusticia de que estas multinacionales tengan millones de hectáreas mientras miles y miles no pueden tener una hectárea donde cosechar, un lote para vivir o acceso al agua potable”.
Tensión y agresión contra una mujer
En medio del conflicto trascendieron videos donde se puede ver a Grabois alterado frente a la llegada de lo que parece ser personal de la estancia y efectivos policiales. En este contexto, y al notar que está siendo filmado por una trabajadora del lugar, decidió pegarle un manotazo para tirarle su celular.
En la breve grabación se puede ver como llegaba al lugar un remolque todoterreno, autos particulares y, al menos, un móvil policial, lo que produjo que el grupo liderado por el militante se acercara violentamente a la fila de vehículos, molestos por la llegada del personal de Lewis junto a las autoridades.
Si bien quienes acompañaban a Grabois intentaron que se alejara de la zona, este continuó avanzando hacia los vehículos. En este momento fue en el que la mujer, sin palabras de por medio, recibió un manotazo de su parte que hizo que se le cayera el celular con el que estaba registrando la situación y desató una ola de gritos y abucheos.
“Eh ¿qué te pasa?”, fue la única reacción de la mujer tras ser agredida por el líder del MTE, un hecho que la tomó por sorpresa.
“Cagones”
En otras imágenes de las tantas que se registraron en la jornada de ayer, se puede ver cómo el dirigente kirchnerista sostuvo una discusión con una agente policial y calificó a los hombres de la fuerza como “cagones”, mientras que señaló que alguien los había amenazado y lo invitó “a levantar la mano si se la banca”.
“Con el resto de los laburantes no hay problema, pero el que amenazó que levante la mano si se la banca tanto”, arengó Grabois mientras que insistió en que “quería escuchar al que amenazó”.
Al mismo tiempo, mientras la oficial intentaba calmar la situación, el militante le reclamó: “Estás trabajando para el inglés”.
“Aparte te mandan a vos que sos mujer, estos cagones. ¿Por qué no vienen los varones? cagones. Son unos cagones. Policía yuta cagón”, cerró visiblemente enojado.
Actualización de la situación en #LagoEscondido https://t.co/3XPiCllt5c
— Juan Grabois (@JuanGrabois) December 28, 2022
El acampe de Juan Grabois en Lago Escondido
El martes, Juan Grabois ingresó junto a un grupo de más de 80 personas a Lago Escondido, argumentando que se encuentra ejerciendo su derecho constitucional a acceder a la costa del lago, bajo la consigna: “Las Malvinas son argentinas, Lago Escondido también”.
“Estamos intentando llegar al Lago Escondido, patrimonio de todas y todos los argentinos pero sólo accesible para algunos privilegiados: los jerarcas del poder judicial, las fuerzas de seguridad, los medios hegemónicos y los políticos serviles al poder real”, había advertido el líder del MTE en sus redes sociales.
Una vez dentro del lugar, la columna de Grabois desplegó carpas a metros del lago, en la parte posterior de la propiedad del magnate inglés, con el objetivo de instalarse en el lugar argumentando que dichas tierras “son públicas”.
La denuncia de la empresa
La empresa Hidden Lake SA informó que denunciaron que Grabois, junto a un grupo de 81 personas, “violentaron el ingreso a la propiedad”, donde señalaron que solo hay “un guardia para ordenar el tránsito de los más de 300 empleados” del establecimiento.
Se retiraron en varias camionetas, una de ellas ploteada con el logo de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). Otra, con domicilio en la ciudad de Buenos Aires, registrada a nombre de “Cooperativa D” y que arrastra una deuda de $151.000 por el incumplimiento en el pago de la patente.