Entraron en vigencia las nuevas normas para paseadores de perros, que están contenidas en un decreto del jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra. Desde hoy, los paseadores de perros de la Capital deberán recoger obligatoriamente los excrementos que sus animales dejen en la vía pública, deberán llevarlos necesariamente con correa, excepto en los espacios reservados para perros que hay en las plazas y, además, no podrán pasear mas de ocho ejemplares.
Según las nuevas medidas, se considerarán paseadores a aquellas personas que lleven a más de tres perros, sean éstos suyos o no. Los paseadores se tendrán que inscribir en un registro gratuito y obligatorio creado especialmente, donde se les entregará una credencial identificatoria. Esta será el instrumento habilitante para ejercer la actividad, tendrá validez también como documentación sanitaria y deberá ser llevada toda vez que se pasee a los animales.
Las nuevas normas están avaladas por algunas entidades del sector como la Sociedad Protectora de Animales Sarmiento, la Fundación Argentina por el Bienestar Animal, MAPA y Ojo Avizor. Quien no cumpla con ellas será multado con hasta 200 pesos, pero las sanciones empezarán a correr en un mes, tras finalizar un período que Eduardo Ricciutti, el secretario de Medio Ambiente y Espacio Público porteño, calificó como de "concientización". Durante este período el gobierno realizará una campaña en la que repartirán folletería informativa y también regalarán correas.
Además serán multados los dueños de perros que no usen correas o que aten a sus animales a árboles y monumentos. Para poder juntar la caca de sus mascotas, los propietarios deberán llevar una escobilla y una bolsa de residuos lista para ser usada.
Esta iniciativa, que le pertenece al diputado porteño Fernando Caeiro (UCR), y que estaba "cajoneada" en la Legislatura, fue decidida de apuro por Ibarra y Ricciutti, debido a que con el calor del año pasado las plazas porteñas se infectaron con un parásito de alto riesgo, proveniente de la materia fecal de gatos y perros, llamada Toxocara.
Este parásito produce una enfermedad en las personas que lesiona los órganos internos y puede provocar padecimientos intestinales o, principalmente en los niños, disminución progresiva de la visión y hasta su pérdida repentina.
Según informó el Gobierno porteño, unos 41 inspectores acompañados cada uno por un policía serán los encargados, a partir de febrero, de controlar que dueños y paseadores junten las deyecciones de sus perros, y también de labrarle la infracción correspondiente en caso de no cumplir con las nuevas normas.
Según un estudio realizado por el Instituto de Zoonosis Luis Pasteur, cada día se acumulan en la ciudad de Buenos Aires unas 40 toneladas de excrementos caninos. En la ciudad existen aproximadamente unos 400 mil perros con dueño y, según esta investigación, la mitad de esta cantidad hace sus necesidades en plazas o en la vía pública. Esto supone que, por día, cada uno de estos 200 mil caninos elimina un promedio de 200 gramos de materia fecal. Para juntar tamaña cantidad se necesitarían unos diez camiones de basura. Ahora, serán los dueños y los paseadores quienes deberánn tomarse el trabajo de hacerlo.
