Un conjunto de gremios comenzó a mostrar las uñas para discutir pautas de las paritarias 2023: acuerdos cortos, que pueden transformarse en permanentes si la inflación se desboca y sin ningún tipo de techo que limite discusiones .
Con ese objetivo en mente, Sergio Palazzo, líder de La Bancaria, diputado nacional del Frente de Todos (FdT) y hoy identificado con el kirchnerismo, puso primera y ya pudo establecer contacto con las cámaras empresariales por el incremento de haberes.
Duro, señalando que el sector financiero obtuvo en los últimos tiempos rentabilidades “extraordinarias”, apostó a obtener un número relevante para sus afiliados, sobre todo tras cerrar un 94,1% para 2022 y con revisión pendiente. Pero aún no consiguió eco y su gremio se declaró en estado de alerta y movilización.
Sus allegados le indican que esperarán los resultados de la audiencia entre las partes, que se producirá el próximo jueves, y se definirán los pasos a seguir, en un escenario que luce sin oferta por parte de las compañías.
Por su parte, los docentes inscritos en la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), uno de los colectivos gremiales de mayor envergadura del país con sus más de 400 mil afiliados, también aparecen en el mapa, calentado la voz de cara al 9 de febrero, fecha en la que fueron convocados a discutir la actualización de remuneraciones.
Sonia Alesso, la secretaria general del gremio, dijo que llegan a la instancia tras firmar una paritaria anual del 114% y anticipan que el planteo será simple: “queremos que haya permanentemente un monitoreo del salario y una revisión”.
Esa estrategia, según la figura sindical, tuvo resultado positivo y dice que se podría repetir, más allá de que el alza de valores podría ser menor a la de 2022. “Se hizo una pauta al comienzo y después tuvimos cuatro revisiones, eso posibilitó ganarle a la inflación, hay que seguir con la revisión permanente porque limitada”, valoró.
Pablo Moyano, uno de los triunviros de la CGT, que alcanzó un entendimiento salarial del 107% anual hasta agosto, es otro de los fervientes opositores al horizonte de haberes y así lo expresa en público y en privado. Es más: sostuvo que ningún colectivo sindical puede cerrar una paritaria en torno a los números que barajó el oficialismo.
En tanto que el secretario de prensa de la CGT y secretario general del sindicato del Seguro, Jorge Sola, fue uno de los primeros gremios que cerró una paritaria en torno al 100%, aporta, aclarando que cada actividad cuenta con debates y calendarios particulares, que la inflacion va aa la baja, que se ha contenido en los ultimos meses y eso obstaculo que no llegue a una cifra de tres digitos.
“En muchos convenios, como el mío, hemos podido recuperar dos o tres puntos pero venimos de años en los que perdimos del 25% al 28% del poder adquitivio”, aseveró.
En este contexto, el dirigente de la calle Azopardo guarda “una expectativa positiva” para los próximos meses y remarca que en el caso de su sindicato estará “en una suerte de paritaria permanente y vamos renovando los números cada tres o cuatro meses, de acuerdo a las variables de la inflación”.
Mientras se espera la cifra que discuta el sindicato de Comercio, una paritaria que se abrirá en abril y que será testigo por la cantidad de afiliados que tiene, 1.800.000, el más numeroso del país, y con el siguiente antecedente: obtuvo un 101 % a lo largo de un año tras monitoreos.